Una locura de partido y un parcial de +15 en el tercer cuarto para el Zalgiris. Ése podría ser el resumen rápido con el que poner etiquetas al partido por el tercer y cuarto puesto de la Final Four de la Euroliga 2018. El conjunto lituano se llevó una victoria (77-79) sobre el CSKA, cimentada en un gran momento tras el descanso y una forma un tanto arriesgada de manejar una ventaja de 20 puntos de la que llegó a gozar. Con todo y con eso, los rusos se acercaron en el marcado y tuvieron hasta dos opciones para ganar el partido en los últimos segundos. Dos triples, cada cual más a la desesperada, que no vieron el fondo de la red.
No hay motivos para ocultar que, al ganar este partido, el Zalgiris ha puesto el broche de oro (de bronce en este caso) a una temporada que se recordará durante mucho tiempo. Y eso que el CSKA estuvo a punto de aguarle la fiesta con un parcial de 23-5 en el último cuarto que acabó metiendo el miedo en el cuerpo a los lituanos. Sin embargo, los de Jasikevicius tuvieron la sangre fría suficiente para aguantar el arreón a la desesperada de su rival y contener la última embestida de un contrincante que no llegó a tirar la toalla.
La gran estrella del partido, aunque sin el reconocimiento de la victoria, fue Mikhail Kulagin. Después de no haber jugado ni un sólo segundo en la semifinal contra el Real Madrid, el invitado sorpresa del CSKA terminó con 14 puntos en 13 minutos y se ganó por derecho propio el tiro que hubiera servido para que los rusos ganasen el partido en los últimos segundos. A final, sin embargo, primó más el control del tempo del partido de Kevin Pangos (9 puntos y 4 asistencias), así como las buenas actuaciones de Vasilije Micic (15 puntos), Paulius Jankunas (15 puntos y 5 rebotes) y Edgaras Ulanovas (14 puntos).
An amazing end to an amazing season.
Watch the highlights as @bczalgiris takes 3rd place!#F4GLORY pic.twitter.com/3zYdxRutnD
— EuroLeague (@EuroLeague) 20 de mayo de 2018
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