La derrota sufrida por los Golden State Warriors a manos de Indiana Pacers por 126-106 fue, según la opinión del entrenador Steve Kerr, una de las mayores humillaciones sufridas por los actuales campeones. Sin embargo, Kevin Durant no está de acuerdo con el técnico y no tiene problema alguno en reconocerlo públicamente.
«Estoy avergonzado. Sé que este partido no tiene ningún significado para los cruces de playoffs, y que estos comienzan la semana que viene. Pero el esfuerzo que hicimos fue vergonzoso, patético», confesó Steve Kerr ante los medios de prensa tras el encuentro.
Por el contrario, Kevin Durant tiene otro punto de vista, que no comulga con el de su entrenador. «El partido nos importaba. Los últimos partidos nos importan mucho, pero ellos jugaron mejor al baloncesto. Salieron a la cancha con una estrategia mejor. Mostraron más agresividad que nosotros y nos costó entrar en el partido. Lanzaron y rebotearon mejor. Pero creo que a todos en el vestuario nos importó el partido. No estoy de acuerdo con el entrenador Kerr, pero entiendo lo que está haciendo».
Las lesiones están haciendo demasiada mella en unos Warriors que partían como principales favoritos al anillo, pero que no van a acabar la regular season como primer equipo de la Conferencia Oeste. Piezas tan importante como Stephen Curry, Andre Iguodala y Kevin Durant se han perdido 28, 16 y 15 partidos respectivamente.