Liderazgo. Esa es la mejor palabra que define a la superestrella de la NBA LeBron James. La pasada noche fue capaz de empatar a uno las Finales gracias a sus 39 puntos, 16 rebotes y 11 asistencias. Y eso que los Cavs no pueden contar con Irving por lesión.
Hoy se ha conocido que antes de iniciar la serie ante los Warriors, LeBron reunió a sus compañeros en el hotel de San Francisco para darles una charla sobre la cantidad de adversidades y obstáculos que se iban a encontrar en la batalla final por el anillo pero que lo importante era estar juntos.
Concluido el speech, comida, música e incluso se encargó de traer peluqueros para distender el ambiente previo a las Finales.
«Fue para unirnos, construir camaradería con los chicos. Muchas veces cuando te concentras en un hotel solo ves a los demás en el desayuno, en la reunión y ya. El nos sacó y hablamos de cosas normales, de todos los días en lugar de las Finales», dice J.R. Smith al Northeast Ohio Media Group.
«‘Bron’ es el mejor compañero de equipo que se puede pedir, porque en la cancha lo da todo y fuera siempre es considerado y hace lo que está en su mano para mostrar su gratitud», añade James Jones.
La traca final, un regalo a cada uno de los compañeros: un Apple Watch que permite trasladar las funcionalidades del iPhone a un reloj de muñeca. Gran detalle pero… ¿lo usará él? Siempre se pone en modo avión durante los playoffs…
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