Como suele ser habitual, los Cavs han exhibido su mejor versión en un gran escenario. Los Thunder visitaban la pasada madrugada Cleveland, y pese a un nuevo triple-doble de Russell Westbrook, bastante más irregular que en partidos anteriores, caían de manera clara ante el conjunto de LeBron James, que dominaba el encuentro desde el segundo cuarto (107-91).
«Simplemente queremos jugar buen baloncesto, y hoy lo hicimos. Todo empezó desde la defensa», afirmaba James, que rozaba el triple-doble con 25 puntos, 14 rebotes y 8 asistencias, tras el encuentro. LeBron alcanzaba además ante los Thunder los 20.000 puntos con la camiseta de los Cavaliers, doblando al segundo máximo anotador histórico de la franquicia, Ilgauskas.
Pero el gran protagonista por parte de los locales ha sido Kyrie Irving, que se ha ido hasta los 29 puntos y 10 asistencias. El base le ganaba su duelo particular a Westbrook, y ofrecía un clínic espectacular en el tercer cuarto, para romper de manera definitiva el partido. Uno de los que lo sufre es el español Alex Abrines. El balear acaba roto ante el manejo de pelota del base de los Cavs, que dejaba jugadas como éstas:
Por su parte, Russell Westbrook sumaba un nuevo triple-doble esta campaña, aunque bastante por debajo de su nivel habitual. El base de los Thunder finalizaba con 20 puntos (7/26 en tiros de campo), 12 rebotes y 10 asistencias en 36 minutos, echando de menos a la segunda unidad de su equipo y a Enes Kanter, cuya baja ha dejado muy mermado el juego interior de los de Bill Donovan. Sólo Oladipo respondía con 17 puntos, mientras que Abrines se quedaba sin anotar en sus 8 minutos en pista.
Westbrook sufría además uno de los tapones de la jornada NBA, el que le colocaba Tristan Thompson al final del segundo cuarto:
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