Número 1.212 de Gigantes, del 26 de enero de 2009. Rudy Fernández, entonces alero de los Portland Trail Blazers de la NBA, hacía historia al entrar entre los elegidos para el concurso de mates que se celebra cada año en el All-Star. Hace seis años se convertía en el primer español en participar en dicho concurso.
Aquel año de debut en la NBA para el mallorquín le consagró como el cuarto máximo anotador de la plantilla de Portland, por detrás de jugadores como Brandon Roy, LaMarcus Aldridge o Travis Outlaw. Únicamente Aldridge permanece en el equipo de Oregón.
Fue la campaña que arrancó la Spanish Connection en la NBA. Sergio Rodríguez se convirtió en el tercer máximo asistente de los Blazers. Los alley-oop entre el canario y Rudy Fernández estuvieron presentes entre las mejores jugadas de cada semana durante todo el año y en los pósters de las revistas.
En aquel número, el personaje de la semana fue el alero, ahora jugador del Real Madrid, con el reportaje: Rudy, a volar en el All Star. En él, curiosamente, machacaba en la cara de un compañero de equipo en el conjunto madridista: Andrés Nocioni, entonces en los Bulls.
Ya en 2009 ocupaba titulares el base de los Timberwolves, Ricky Rubio. Aquel inicio de año 2009 le confirmó como el mejor jugador en el apartado de asistencias/pérdidas de la Liga ACB. El director de juego catalán fue el primero en esta curiosa estadística en la primera vuelta de la liga.
Otro nombre que suena y mucho actualmente en la NBA y que fue uno de los personajes de la revista es Blake Griffin. En el reportaje «Una bestia anda suelta», se repasaba su éxito antes de llegar a la mejor liga del mundo. En su etapa de high school, llevó a su instituto, el Oklahoma Christina School, a cuatro campeonatos estatales consecutivos.