No era fácil la tarea para el Joventut en el madrugador partido que afrontaba por el tercer y cuarto puesto ante el Gran Canaria. Tras jugar cuatro de las últimas cinco finales, los de Badalona debían de reponerse al ‘shock’ de perder en el último segundo la semifinal frente al Real Madrid apenas 11 horas antes. Lo hicieron, y de qué manera. Gran partido del equipo de Daniel Miret, muy superior al Gran Canaria (70-86).
Lo demostraron los verdinegros desde el primer cuarto. Apenas tres minutos iniciados el partido, ya vencían por 9 (4-13) gracias al recital de un base que va para genio. Nenad Dimitrijevic desborda talento por todos los poros de su cuerpo. Al descanso, así lo demostró, con 16 puntos (finalizó con 23, 7/10 en tiros de campo, y 6 asistencias) que comandaban la victoria parcial del equipo catalán (37-42).
¡Espectacular pase del base!
Los insulares se mantenían en el partido gracias los puntos de su juego interior. Gadiliauskas (8) y Diene (11) mantenía con vida a un equipo que se apoyaban en su acierto en el tiro de 2 puntos (10/15 al paso por los vestuarios).
En la segunda parte, continuo el acierto canario (por encima del 50% en tiros de campo) pero apareció Quim Salvans para sumarse a la fiesta de Dimitrijevic. Sus 8 puntos seguidos entre final del tercer y comienzo del último cuarto (acabó con 20) despegaron definitivamente al Joventut (40-50 y 53-67 al comienzo del último cuarto). Los verdinegros tuvieron tiempo incluso para la fiesta con el triple final de uno de los jugadores con menos minutos, Canovas.
La fiesta para el Joventut, (que anotó 12 lanzamientos desde el 6,75) pero también la mención de un gran torneo para los canarios, que han vuelto a pelear por las medallas tras muchos años.
