Cuatro años seguidos lleva el Ekaterimburgo comenzando de la misma manera su andadura por Europa. Es decir, ganando la Supercopa. El Nadezhda, tras ceder desde el principio por un 27-14 de parcial, acabó cediendo por 87-67 ante el poderío de Brittney Griner (28 puntos y 11 rebotes).
El título para el conjunto ruso, actual campeón de la Euroliga, supone un nuevo entorchado para los españoles Alba Torrens (aún lesionada, no pudo jugar), Miguel Méndez (primer entrenador) y Nacho Martínez (ayudante). El ex técnico de la Liga Femenina no pudo ocultar su alegría tras el duelo: «Estamos muy contentos porque siempre es especial ganar en casa, en nuestra ciudad y ante nuestros fans. Hemos jugado un muy buen partido. Prometo que seguiremos trabajando duro para jugar el mejor baloncesto posible».