El mantenimiento del factor campo conseguido al conquistar la Copa Príncipe por parte del Guadalajara Ciudad de Congresos y la clasificación en la última jornada de la liga regular del Grupo Eulen El Carrefour el Bulevar de Ávila para los playoff hizo que estos dos equipos, que se conocían a la perfección al haberse enfrentado en pretemporada además de en liga, se cruzaran en los playoff de ascenso a la Adecco Oro.
Los cuartos de final de la competición se disputaban en formato de ida y vuelta, contando el basket-average para la clasificación para semifinales. El conjunto abulense vencía en el primer partido de la serie por 70-69 tras una canasta de Balmón y se llevaba un más +1 para el Polideportivo San José alcarreño. Allí, el mejor del Guadalajara era el base Sergio Llorente con 16 puntos que una temporada antes había ejercido como local en el Centro de Usos Múltiples Carlos Sastre.
Sin margen de error se encontraba el CEBA Guadalajara para el segundo partido de la eliminatoria. Solo una victoria por dos puntos le daría la clasificación. ¿Cuánto dan de sí 120 segundos en baloncesto? El partido entraba en los dos últimos minutos con tres puntos de ventaja para los de Armando Gómez (51-54). Llorente asumía galones en ataque y pese a llevar dos lanzamientos consecutivos errados anotaba un triple providencial que empataba el partido. “Nunca he tenido miedo a fallar; el que no tira no mete” declaraba a la finalización del partido Sergio Llorente.
Una bandeja de Arteaga ponía momentáneamente la eliminatoria a favor de los locales con menos de cincuenta segundos por disputarse. El Óbila de la mano de Vicens empataba el partido a 56 e inclinaba la balanza del otro lado. De nuevo, un lanzamiento desde 6,75 de Llorente parecía sentenciar la clasificación a 28 segundos para el final (59-56). ¿La ‘venganza’ se sirve fría?
Y decimos bien parecía ya que los visitantes, apoyados por cerca de 150 personas y muy cargados de faltas, tuvieron dos lanzamientos para forzar el empate que les hubiera dado el pase a las semifinales. No sucedió porque de nuevo el pívot del Guadalajara Ciudad de Congresos ponía un tapón en el lanzamiento del killer visitante Riley Luettgerodt y Llorente se quedaba el balón del triunfo.
El base fue el MVP del partido con 26 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias mientras que el pívot se fue hasta los 10 puntos, 5 rebotes y 3 tapones. ¿Con qué obsequiarán el ex colegial y el ex madridista al público del San José en las semis?
