En edades de formación y con un nivel tan alto como el que se está mostrando en el Torneo Leucemia y Linfoma, detalles tan importantes como el cuidado del balón son determinantes. Para Vass Alcobendas, en la pelea por el quinto y sexto puesto ante Unicaja, fue absolutamente clave. Las 41 pérdidas del conjunto madrileño le lastraron para perder el choque, a pesar de intentarlo hasta el final, por 60-67.
Fue un partido con dos momentos bien diferenciados. Los que pasaron entre el fulgurante comienzo del conjunto entrenado por Ricardo Pomatta, que anotaron 25 puntos en el primer cuarto, y llegaron a ganar por 14 puntos de diferencia, y la reacción del cuadro andaluz. Impulsados por el trío Marcos Pérez, Carlos Moya y Alessandro Scariolo, el equipo de Pablo García redujo la distancia rápidamente para coger una ventaja que ya no volvería a perder.
Al descanso, ya mandaba (34-40). En el tercer cuarto, y aprovechando los balones perdidos de Alcobendas, consiguieron la máxima diferencia. Parecían insalvables los 15 tantos de ventaja para Unicaja con los que se llegó al término del tercer cuarto (46-61). Sin embargo, los madrileños, que el año pasado fueron terceros de Madrid en Infantil, no se dieron por vencidos. Con un parcial de 8-0, se pusieron a ocho puntos (58-63). Remaron pero no lo consiguieron. Unicaja aguantaría las embestidas y se llevaría el partido que le daba el quinto puesto en el torneo.