La Comunidad de Madrid y Cataluña se jugaban el todo por el todo en una final trepidante en la categoría de cadete masculino. Tras llegar de gran manera a la última cita de la competición, las dos selecciones autonómicas más poderosas dieron un recital de buen juego.
La primera parte fue una lucha de estilos, con Madrid buscando más el juego en estático, moviendo el balón por el perímetro y actuando por dentro con sus poderosos interiores, mientras que los catalanes intentaban imprimir un mayor ritmo para evitar estancarse en el entramado defensivo y saltar lineas con un juego ágil y al contraataque.
Cada uno con su idea tiraba hacia delante, y al final de los primeros veinte minutos, el marcador reflejaba un parejo 37 a 33 en favor de la Comunidad de Madrid.
Tras un descanso animado en el que la grada se lo pasó en grande cantando y bailando, la pelota naranja volvió a ponerse en movimiento y el espectáculo siguió su curso. Como cantaba Freddie Mercury, ‘Show must go on’.
Una agobiante defensa con presión a toda cancha y constantes ayudas de Cataluña provocó una reducción considerable en el apartado ofensivo de la Comunidad de Madrid. Los de blanco se encontraron con un muro, y aunque consiguieron salir con empate a 45 del tercer periodo, fue más por el desacierto de los catalanes. Los de amarillo y rojo no tuvieron especial efectividad de cara al aro, aunque al menos dejaron todo en tablas para decidirse en 10 minutos de infarto.
Ninguno de los dos se distanciaba en un último cuarto sensacional, sin embargo, en la recta final, con Kostadinov en modo ejecutor (17 puntos y 11 rebotes), los de la Comunidad de Madrid hicieron gala de su increíble talento individual para llevarse el título a casa por 63 a 55.
Sigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
