La concentración de la Selección femenina prevista para febrero en Francia se tuvo que suspender. Paula Ginzo
(23 años, 4 veces internacional), pívot del Lointek Gernika, estuvo en la convocatoria de Lucas Mondelo. Pero apenas reunidas y con las habituales PCRs ya hechas, tuvieron que regresar a casa. La de Santoña aprovechó para retomar sus libros de estudio y prepararse para su primera Copa de la Reina (hace dos años, con Al-Qáceres, se perdió la cita por lesión).
Gigantes: ¿Qué importancia le das a la alimentación en tu preparación? ¿Cuidas mucho este aspecto?
Ginzo: Es un valor primordial si quieres competir a alto nivel. Igual que se da por descontado la preparación física, técnica y mental, la nutricional es una parte clave a tener en cuenta. La clave está en una dieta
equilibrada, comiendo de todo. Estoy contenta con mis analíticas porque dan muy bien. Me gusta la verdura, tomar hidratos o proteínas cuando tocan… Como cinco veces al día.
G: Centrándonos en los desayunos, ¿cómo te los planteas, qué hábitos tienes al comenzar el día?
Ginzo: El desayuno es mi comida del día preferida, la que más me gusta. Es lo primero que hago al despertarme, antes de cambiarme y de nada. Hay que cargar las pilas para la jornada. Té, fruta de temporada y mi bol de cereales. A diario utilizo los integrales, pero algún día libre disfruto de los de chocolate.
G: Debutaste con la absoluta en un partido del Preeuropeo en Amsterdam, hace dos años y medio. ¿Qué expectativas de futuro tienes?
Ginzo: Mi objetivo es trabajar bien cada día, ser una esponja para seguir aprendiendo. Progresar, dar pasos adelante… La Selección es una ilusión, pero también el premio a tu día a día.
G: Gracias por tu tiempo y felicidades por tu progresión.
Ginzo: Gracias a vosotros
