La NCAA es diferente, especial. La NCAA tiene algo que no se ve en ninguna otra parte. La NCAA representa todo aquello por lo que amamos el baloncesto.
La liga universitaria femenina puso un broche de oro a un Marzo loco. Notre Dame y Mississippi State se jugaban el título en un pabellón abarrotado. Los aficionados habían llenado cada rincón del Nationwide Arena, en Columbus, esperando ver un espectáculo único, pero lo que vieron fue mucho mejor.
La disputa fue tensa, apretada y épica. Como una buena final. El luminoso estaba igualado a falta de tres segundos para que la bocina indicase el final del tiempo reglamentario, sin embargo, una heroína llamada Arike Ogunbowale, se suspendió en el aire desde el perímetro, fijó su mirada en el aro y clavó un triple para la historia.
Resultado Final: Notre Dame 61-58 Mississippi State
Jugadoras Destacadas:
Arike Ogunbowale (Notre Dame): Más allá del triple, su partido fue de menos a más. La excelsa anotadora de las Irish se puso la capa de SuperWoman y anotó 18 puntos. No tuvo su noche en la estadística (6 de 21 en tiros de campo), pero no todo son números. Importa más la calidad que la cantidad.
Teaira McCowan (Mississippi State): Un constante tormento cerca del aro. La giganta aprovechó sus más de dos metros de estatura para campar por la zona a sus anchas, aunque tampoco tuvo su día más acertado (7 de 19 en tiros de campo). Eso sí, reboteando (17), intimidando y sacando faltas, no tiene rival.
Jessica Shepard (Notre Dame): La primera canasta del partido fue suya, aunque no lo pudo ser la última. Empezó enchufada y se mostró fuerte todo el choque. Luchar contra McCowan no fue fácil, y aunque perdió muchas batallas, usó su cuerpo a las mil maravillas para ganar otras tantas. Astucia y fundamentos para dejar 19 puntos en el marcador y 6 rebotes en su cuenta.