El Madison Square Garden acogió en sus entrañas uno de los eventos mas bonitos del basket universitario, la final del NIT. No es la locura de Marzo, pero tiene su encanto, y para Penn State tuvo también un título.
Los Nittany Lions se impusieron a Utah por 82 a 66 gracias a una segunda mitad formidable en ataque.
Los tres nombres propios fueron:
Lamar Stevens (Forward/Penn State) – Inspiradísimo en la ofensiva con un 11 de 15 en tiros de campo, incluido un 4 de 5 en triples. 28 puntos para un torbellino que arrasó a los Utes en defensa. No hubo forma de cortar su racha y se salió del mapa. Enchufado y acertado de cara al aro.
Tony Carr (Guard/Penn State) – Un tipo especial con oportunidades para ser NBA. Rozó el triple doble y fue el ancla de su equipo en todo momento, como lo ha sido a lo largo de toda la temporada. 15 puntos, 14 asistencias y 9 rebotes fueron los números de un todoterreno que puede jugar 40 minutos sin bajar el ritmo.
Justin Bibbins (Guard/Utah) – El pequeño cohete despegó fuerte pero aterrizó sin suavidad y no completó el viaje con éxito. Bibbins es un base bajo pero con un gran talento que, gracias a su bote y su electricidad marca diferencias. Esta vez su talento no sirvió para conseguir el triunfo, pero aportó 15 puntos, 4 asistencias y 4 rebotes.