Los que amamos el baloncesto sabemos que marzo es un mes especial, un mes de locura; es el mes del March Madness en la liga universitaria estadounidense, la NCAA.
Y nosotros también nos volvemos locos con esos pequeños bajitos que corren y juegan con
tanta ilusión en el Babybasket que organiza la Federación de Baloncesto de Madrid.
En esta ocasión visitamos el Colegio Amorós, en el madrileño barrio de Carabanchel Alto. Cinco escuelas de baloncesto se encontraron para JUGAR unos CON otros: dos equipos del Colegio Amorós, CREF, el Colegio Santa María de Orcasitas y el Club de Baloncesto San Fermín.
Uno de los colegios invitados al evento tuvo que renunciar, pero eso no minó la moral de los pequeños; que aprovechaban ese rato para beber y descansar mientras veían los otros partidos. De ese modo también se aprende.
El Babybasket no para de crecer: “En cuanto se abre una sede, se agotan las plazas a las pocas horas”, nos comentaba uno de los responsables de Orcasitas. Y no es de extrañar; es una iniciativa estupenda en la que hacer ejercicio, aprender un deporte, hacer amigos y divertirse va en el mismo pack.
Con cada carrera y cada lanzamiento a canasta se despierta la emoción de los padres que, orgullosos, animan en la grada y alientan a sus pequeños jugadores. Cuando el balón entra por el aro, es siempre una fiesta, sin importar de qué equipo ha sido.
Como no hay resultado, no hay perdedores: todos ganan. Nunca falta el saludo al otro equipo ni al árbitro al final de cada encuentro. Como tampoco la foto de familia final. De esta manera se fomentan valores fundamentales que el deporte exporta a la sociedad: compañerismo, reconocimiento del otro, respeto a las normas…
Gran actividad para iniciar en nuestro deporte a niños y niñas de 5, 6 y 7 años.
¡NO OS PERDÁIS LA PRÓXIMA CONVOCATORIA! NUNCA VERÉIS TANTAS SONRISAS EN UN CAMPO DE BALONCESTO…
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