Llegaba el Joventut de Badalona a Rusia como líder de su grupo en la Eurocup tras el antológico partido de la semana pasada decidido con un triple descomunal de Klemen Prepelic. El jugador cedido por el Real Madrid siguió con su idilio anotador de este principio de curso y fue el máximo anotador de la Penya (22 tantos), pero su equipo no pudo triunfar en la cancha del Unics Kazán, con el que cayó por 86-74.
Lo hizo merced al extraordinario rendimiento de Errick McCollum. El hermano del CJ, una de las grandes estrellas de la NBA, y que ya se pronunció en verano sobre el motivo de tanta bajo en Estados Unidos (que llevó a su hecatombe en el Mundial) se salió con 32 puntos y 41 de valoración, dejando sin opciones al equipo de Carles Durán.
El mal día en el lanzamiento exterior del conjunto badalonés (sólo 6 triples anotados con un 23% de acierto) lastró a un equipo que desde el segundo período cedió terreno a su rival. Una distancia que no pudieron recuperar a pesar del extraordinario rendimiento de su pívot internacional Alen Omic (20 puntos). Otro jugador interior de los españoles, Luke Harangody, sufrió en sus carnes la jugada del partido, obra de Artem Klimenko, que le inmortalizó con un mate para el recuerdo.
#Eurocup Vaya mate ha recibido ahora mismo el Joventut…pic.twitter.com/qu9UeTR5Zm
— Gigantes del Basket (@GIGANTESbasket) October 23, 2019
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