La derrota más abultada de la historia del Barça en competición europea, por 39 puntos ante el Real Madrid, dejaba a Georgios Bartzokas sin explicaciones pero no sin palabras. El técnico griego tenía claro que había vivido «una de las noches más duras para el club y para el equipo».
«Ha sido un partido loco: hemos empezado anotándolo todo y luego, de alguna manera, a los cuatro o cinco minutos, nos hemos rendido y hemos dejado de jugar. Lo hemos dejado de intentar a los cinco minutos», aseguraba Bartzokas.
«Puedo hablar del calendario, de los partidos seguidos que hemos jugado o que estamos sin cinco jugadores básicos. Después de tantos partidos, con este calendario, parecíamos exhaustos, física y mentalmente. Físicamente lo entiendo pero mentalmente no entiendo por qué hemos dejado de jugar al inicio del partido», explicaba el griego sin buscar excusas.
«Pido perdón a los aficionados, que nos han apoyado mucho, incluso después del partido. Aún seguían cantando. Para nosotros es una gran lección. No podemos caer más bajo», añadía Bartzokas.
«Hemos tenido una reunión dura en el vestuario. Esto es deporte, así es la vida, pasan cosas malas, pero tienes que jugar con orgullo. Intentaré convencer a todo el mundo en el equipo», concluía el entrenador.
La estrella del equipo, Tyrese Rice, tuiteaba sus sensaciones tras el partido: «Mira que me siento avergonzado. Debemos una disculpa a todos los que vinieron esta noche al Palau por nuestra falta de esfuerzo. (…) No hay tiempo para lamentarse o bajar al cabeza porque es noviembre. Mantengamos la calma y entendámoslo. Hay que seguir».
Sigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
