No había estado muy fino en los primeros 40 minutos, pero Nando De Colo demostró su gran estatus en el momento más decisivo de la temporada para el CSKA. El francés anotó 10 puntos en la prórroga de los 22 con los que acabó el encuentro (más 7 asistencias) para teñir de rojo una final europea para recordar. Al término, el escolta expresó sus sensaciones a la Euroliga: “Todos piensan que es fácil porque somos el CSKA, pero no es cierto”.
Una actuación tan soberbia como la que firmó De Colo en la final le valió para ser nombrado MVP, también de la Final Four (media de 26 puntos y 5,5 asistencias entre la semi y la final). Hay que recordar que el ex de los San Antonio Spurs fue nombrado el viernes mejor jugador de la temporada en Europa.
Una unanimidad que convierte a De Colo en rey del viejo continente, haciendo algo casi inédito: es la primera vez, desde Diamantidis en el año 2011, que un jugador gana los dos MVP (liga regular y playoff por un lado, Final Four por otro) de la Euroliga. La temporada de Nando De Colo ya está en la historia.
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