Un año después de que Kostas Sloukas cambiara el rojo por el verde, las relaciones entre Olympiacos y Panathinaikos siguen tensándose. De hecho, Sloukas no pudo estar presente en el acto de retirada de la camiseta de Georgios Printezis, en lo que fue una noche especial para el baloncesto griego.
«Fue muy triste no poder estar allí, me hubiese gustado estar«, reconocía Sloukas a Eurohoops. «Era un gran deportista, jugamos juntos, es mi amigo, pero no se puede hacer nada. Así es la vida y vi todo el acto por la televisión».
El base griego es el centro de la diana de los aficionados de El Pireo y culpa directamente a las redes sociales y a la influencia que ejercen. Sin embargo, Sloukas no se ve intimidado por los comentarios:
«Las redes sociales desempeñan un papel muy importante. Afectan a la gente, tanto negativa como equivocadamente. Mi trabajo está en la cancha, para dar respuestas allí, y las críticas tampoco me afectan mucho. Sólo escucho a la gente cercana y tengo que ser responsable ante mi entrenador y mi equipo«.
Pese a todo, Sloukas demostró acertar con el cambio el verano pasado al convertirse en campeón de la liga griega y de la Euroliga, donde además fue elegido como MVP de la Final Four.
Foto: EuroLeague
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