El Real Madrid vivió en el Mediolanum Forum un partido atípico e incluso histórico. No se suelen ver partidos a puerta cerrada que no tengan que ver con una suspensión al equipo local y, en este caso, no era así. La expansión del coronavirus por el norte de Italia, lugar de la disputa de este encuentro, obligó a las autoridades milanesas a no permitir el acceso de aficionados a este encuentro. Sólo un puñado de periodistas, los responsables de la señal televisiva y el personal de los dos equipos pudieron entrar.
El equipo español sobrevivió a un día extraño en el que no contaban con Llull, Deck, Randolph, Causeur, Mickey y en el que se vio peligrar también a Jeff Taylor por un golpe feo en el tobillo. La circunstancia especial era un añadido, pero sobre todo contaba que Laso debía jugar con lo puesto una vez más pese a contar con una plantilla amplia. Los jugadores respondieron, dejando lo extradeportivo a un lado, y se llevaron una victoria trabajadísima y complicada por 73-78 ante un Olimpia que puso muchos problemas.
¡TAPONO Y ME LA QUEDO! 😁
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Los de Pablo Laso supieron ir a remolque cuando tenían que ir y asestar el golpe definitivo cuando tocaba. Empezaron realmente mal, con un primer periodo que acabó 25-11 y un marcador que se puso 30-13. Ésa fue la máxima del encuentro para los locales, ese +17, y de un plumazo se cargó la diferencia el Madrid: 0-17 de parcial, 30-30 y partido nuevo. Ayudó el empuje de Nico Laprovittola, nervioso por momentos pero hábil para encauzar una situación que pintaba fea. Antes del descanso a los blancos se les fue de nuevo el tino y el Milán se fue diez arriba a los vestuarios. Había que mejorar la defensa y eso hicieron. Los dos. Una tercera manga en modo tostón, con poquísima anotación (23 tantos entre ambos) y poco ritmo, dio paso al momento que el Real Madrid aguardaba. La especulación de los italianos dejó hueco para que un gran Rudy Fernández, vivo en las dos partes del campo, y Trey Thompkins, con un par de triples seguidos, lanzaran al cuadro español al control del encuentro: 0-16 de parcial en 3:40 minutos. Messina se la jugaba con dos bases, Sykes y ‘El Chacho’, pero un Campazzo más tapado de lo normal supo ver las jugadas adecuadas en los últimos dos minutos y asegurar la victoria, la 21ª para los suyos en la Euroliga esta temporada.
Walter Tavares fue, de nuevo, el mejor del Real Madrid. Cambió muchos tiros, intimidó a Luis Scola y Kaleb Tarczewski en gran medida y acabó con un doble-doble: 13 puntos y 12 rebotes para 28 de valoración. Capital en la remontada de 17 puntos del segundo cuarto y en tres jugadas decisivas del último minuto y medio para amarrarlo.
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Foto: EuroLeague Basketball
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