Cada vez que una liga o una competición establece cualquier tipo de reglamentación o limitación de gasto aparece una comparación con el caso de la NBA. Eso mismo ha sucedido con las nuevas normas de límite salarial presentadas por la Euroliga para la temporada 2025-26 y que aspiran a cambiar notablemente la manera que se construyen las plantillas.
Si bien guardan ligeras similitudes en ciertos aspectos, como pueda ser la multa por sobrepasar el último umbral del límite, las diferencias son mucho mayores que los puntos en común.
Por eso, en Gigantes del Basket te explicamos por qué el límite salarial de la Euroliga no se parece tanto como muchos piensan al de la NBA.
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Cómo funciona el límite salarial en la NBA
La organización económica en la NBA parte de una premisa muy importante: jugadores y franquicias son socios. Esta asociación surge del convenio colectivo de 1983 que dio lugar a dos puntos cruciales en la historia de la organización como fueron la agencia libre y el límite salarial. Teniendo esto en cuenta, cualquier comparativa entre la NBA y el resto del mundo pierde prácticamente todo sentido.
Más si cabe por la manera en la que se calcula la cifra concreta del salary cap que marca el límite de gasto de los equipos. Este recibe el nombre de Basketball Related Income (BRI) que son los ingresos operativos agregados recibidos por los equipos de la NBA, la liga y cualquier empresa en la que la competición o una entidad relacionada con esta tenga al menos una participación del 50%. Esto sale de las entradas, derechos de televisión, derechos de imagen o merchandising. Por ejemplo, en esta temporada 2024-25 el límite se establece en 140,5 millones de dólares. De hecho, de este BRI sale gran parte de los salarios de los jugadores, concretamente el 51% de esa cifra, y el 49% restante va a las arcas de las franquicias.
A partir de aquí la cosa se complica pues aunque existe un límite ningún equipo acaba la temporada por debajo de este. Es aquí donde aparece el llamado Threshold, que es el verdadero tope, pues es el máximo que puede acumular una franquicia sin que reciba una multa en forma de impuesto de lujo. Para este curso esa cifra asciende a 178,1 millones. Superado ese umbral aparecen el primer y segundo apron del impuesto de lujo. Para comprender mejor estos nuevos tramos puedes leer este artículo de Alejandro Gaitán aquí en Gigantes donde se explica al detalle.
Más allá de esto, una similitud que sí existe entre ambos modelos es la existencia de un suelo de gasto, un mínimo que todos los conjuntos han de cumplir. En el caso de la NBA para este año es de 126,5 millones y, en este punto de la temporada, solamente los Detroit Pistons están por debajo. Esta norma se calcula en base al 90% del tope salarial. No obstante, recientemente cambiaron las normas, que exigen que las franquicias lleguen al inicio de la campaña por encima de ese suelo o deberán afrontar algunas limitaciones, multas o restricciones que se pueden consultar aquí.
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Cómo funciona el límite salarial de la Euroliga
El límite salarial de la Euroliga también se calcula en base a ingresos, sin embargo, lo hace estableciendo una media global de los clubes en base a los ejercicios de las dos últimas temporadas.
Así, el sistema comprende diferentes niveles de gasto en base a esa cifra final y global del límite salarial de los 13 clubes accionistas que participan de la Euroliga. Un primero que sirve de suelo del 32%, un segundo del 40% y un máximo del 60%. El primero varía en función de si es wildcard (26%) o si es campeón de la Eurocup (23%).
Además, en contraposición a la NBA, en la Euroliga se pueden «eliminar» del límite a dos jugadores, los que más cobran, para que así no impacten en las cuentas globales, como también reducir el impacto de aquellos que llevan más de 3 años en el club, por lo que se reduce un 25% su salario final en el cálculo. Por otro lado, aquellos jugadores menores de 23 años no entran tampoco dentro de estas normas, cosa que no sucede al otro lado del Atlántico.
No obstante, el punto común de ambos procedimientos comprende una multa para los clubes que superen el umbral máximo establecido. En la Euroliga se prevén multas de entre 0,5 y 1,5 por cada euro que se supere del límite marcado. Para saber más sobre los detalles y las excepciones aplicables a esta nueva normativa te lo contamos aquí.
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