Dos tiros libres de Kyle Hines a 1,1 segundos el final, tras una rigurosa falta de Johannes Voigtmann, daban la victoria del CSKA por 84-82 en el segundo partido de la serie (2-0) y desataban las quejas de Sito Alonso.
«Respetamos al CSKA de una manera increible. Han trabajo muy duro para ganar el partido, han hecho una buena temporada regular. Tienen una gran historia como club y como equipo», empezaba. «Es mi primer año en el Baskonia, pero lo conozco bien. Ya respetaba al Baskonia por su historia y por las veces que han llegado a la F4 y por las veces que han hecho una gran temporada regular, incluso esta. El equipo ha estado entre los 8 mejores un 90% de veces».
Después de esta introducción, Sito proseguía: «Por todo esto, el Baskonia merece un respeto. Y pensamos que a veces no recibimos el mismo respeto. A veces debemos hacer el doble de esfuerzo para conseguir lo mismo. Recordad, he dicho que respeto al CSKA y lo felicito. Hace un buen trabajo, tiene buenos jugadores y es un buen club. Pero estamos aquí porque nos lo merecemos. Debemos tener los mismos derechos en cualquier momento y nos damos cuenta que lo intentamos todo para ganar y no podemos. Le jugamos de tú a tú a uno de los mejores equipos de Europa pero no podemos competir de la misma manera en cada partido».
«Me gusta escuchar a mis jugadores, que son los protagonistas principales en el baloncesto. Ni los entrenadores ni los árbitros, los jugadores son lo más importante. Y quiero protegerlos de los contactos. Cuando el rival juega duro, yo quiero jugar duro. Y me gusta jugar duro cuando hay el mismo criterio en los dos lados. Y es lo último que voy a decir de esto», concluía el técnico antes de aclarar que la queja era «por los dos partidos seguidos, 80 minutos, no por el último».
«Merecíamos la prórroga», añadía antes de lanzar un aviso final: «Si creemos juntos, afición y jugadores, volveremos aquí. Pero tenemos que creer. Queremos competir y ganarles dos veces, y luego volveremos».
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