Tracy McGrady es miembro del Salón de la Fama. El aplauso entre todos en el que formaba parte del Hall of Fame.
Recordamos como fue su gran discurso en septiembre:
«Mi esposa sabía algo sobre mí en ese ascensor que todavía tenía que admitir y decir en voz alta», dijo McGrady al empezar su charla. Contaba la historia de cómo su mujer le convenció de lo que era, lo que había conseguido. Así comenzó:
YES, YES, YES@Real_T_Mac #17HoopClass pic.twitter.com/yfRg4g9a78
— NBA Spain (@NBAspain) September 9, 2017
«Había una razón por la que ella quería que me mirara en ese espejo y decir que merezco estar en el Salón de la Fama y también había una razón por la que no podía hacerlo. Tenía un montón de pensamientos en mi mente de por qué no merecía estar aquí. Me puse a pensar en todos estos grandes jugadores de la NBA, los que habían logrado tantas cosas grandes. Entonces comencé a compararme a ellos. Era demasiado fácil concentrarse en lo que no tienes y lo que no lograste, pero estoy agradecido por aquellas personas que vieron en mí y creyeron en mí, tal vez cuando yo siempre no creía en mí mismo «.
T-Mac merecía algo así y recordó una gran anécdota de cuando era niño. Fue invitado a un campus de Adidas y la estrella era Lamar Odom. A McGrady le dieron el número 175, nadie se fijó en él. Al terminar el torneo, acabo el segundo, detrás de Lamar. Posteriormente marchó al Mount Zion Christian Academy y se apuntó al Draft de 1997.
“Nadie tenía idea de quién era Tracy McGrady. Jugué contra los mejores del mundo en ese momento. Dejé ese campamento como el jugador número 1. Del 175 al número 1”.
T-Mac es ya un miembro del Salón de la Fama.
La frase de T-Mac en su discurso.#17HoopClass pic.twitter.com/9YhYL1gsx7
— NBA Spain (@NBAspain) September 9, 2017
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