Giro radical en el planteamiento de Amar’e Stoudemire, que a pesar de que había dejado su última aventura, esta vez en la liga china (Fujian Sturgens) con la intención de regresar a la NBA, acabará debutando en la Euroliga. Lo hará con la nada desdeñable edad de 37 años y en un equipo de primer nivel europeo, como es el Maccabi de Tel Aviv, según ha hecho oficial el propio club.
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— Maccabi Tel Aviv BC (@MaccabitlvBC) January 22, 2020
Amar’e Stoudemire llega al tercer clasificado de la Euroliga
Los israelíes jugarán este jueves en la casa del colista, el Bayern de Múnich, su encuentro número 21 en la Euroliga esta campaña. Y de momento, están ante sus mejores resultados en muchas temporadas (son terceros, con 14 victorias y 6 derrotas). Para la parte final de fase regular, se refuerzan con este ala-pívot de 2,11 de altura, con nacionalidad israelí y que vivirá su segunda etapa en dicho país.
Y es que, tras militar en los Phoenix Suns, New York Knicks, Dallas Mavericks y Miami Heat, el número 9 del Draft de 2002 se marchó al equipo del que era accionista minoritario, el Hapoel de Jerusalén, en el que estuvo de 2016 a 2019. Ahora, llega al equipo de Giannis Sfairopoulos por las lesiones de Tarik Black y Omri Casspi para ayudar en la pintura a Othello Hunter, Jake Cohen y Quincy Acy, según asegura el propio conjunto campeón de la Euroliga en seis ocasiones. Jalen Reynolds y el base Aaron Jackson también reforzaron hace pocas fechas al mítico conjunto amarillo, que también cuenta con las bajas de larga duración John Di Bartolomeo y Nate Wolters.
«Estamos muy contentos de que Amare Stoudemire vaya a vestir la camiseta de Maccabi Fox Tel Aviv. Viene a ayudar a sus nuevos compañeros de equipo en la liga israelí y en la Euroliga. Quiero darle la bienvenida a nuestro equipo y a la familia Maccabi. También quiero agradecer a nuestros propietarios por el esfuerzo, uno más durante la temporada, con la que nos dan todo para el éxito del equipo», comentó Sfairopoulos, técnico del conjunto israelí.
El propio Stoudemire también ha hecho sus primeras declaraciones como nuevo jugador del Maccabi: «Feliz de estar en Israel, el lugar que amo. Tengo la oportunidad de jugar al más alto nivel en Europa, lo cual es un sueño hecho realidad».
Su vinculación con el mundo judío
Todo comenzó en 2010, nada más firmar un contrato de 100 millones de dólares con los Knicks. Amar’e Stoudemire viajó a Israel con la intención de explorar sus nuevas convicciones. «Siento que puedo ser yo mismo en Israel. No tengo porqué sentirme como un paria porque quiera llevar una vida religiosa». El seis veces All-Star de la NBA tiene tatuados una estrella de David en la mano y «Dios» en hebreo en el antebrazo.
Además, cuando llegó a Israel en 2016, estudiaba la lengua dos veces a la semana y visitaba lugares como Jericó o el desierto del Negev con la intención de seguir conociendo la historia judía. El motivo de esta convicción puede estar en sus duros orígenes: su padre murió cuando Stoudemire tenía 12 años de un ataque al corazón, y su madre vivió continuamente entre el entrar y salir de la cárcel (robo, posesión de drogas o conducción bajo los efectos del alcohol…). En marzo de 2019 recibió la nacionalidad que le permitirá jugar como israelí en la competición doméstica con el Maccabi.
Ahora, Stoudemire vive una de sus últimas aventuras como profesional. Lo hará debutando en la Euroliga con 37 años. Un fichaje con un impacto mediático muy potente. Queda por ver lo que deportivamente puede aportar Stoudemire en la Euroliga a estas alturas de su carrera, pero es una muestra más de la potente apuesta del Maccabi por regresar a la élite continental.
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