Aitor Zubizarreta (1.90 m.; 22 años) ha completado su estancia en Estados Unidos liderando a Idaho College al Sweet 16 de la NAIA, promediando 13,2 puntos, 4,3 rebotes, 2,6 asistencias y 1,5 robos por encuentro. Tras completar el ciclo universitario de 4 años, dos en Portland y dos en Idaho, el que fuera máximo anotador del Campeonato de España Junior de 2013 con 19,7 puntos por choque atiende a Gigantes para hablar de presente, pasado y futuro.
¿Cómo valoras tu experiencia universitaria en Estados Unidos? No sólo a nivel deportivo, también como experiencia vital, personal y de formación…
Ha sido una experiencia única que recomendaría a todos los chicos y chicas que tengan la oportunidad de venir. He pasado por todo tipo de momentos. El primer año tuve días en los que la única cosa que quería era volver casa, pero sobre todo he tenido días que nunca olvidaré. Esta experiencia me ha ayudado en muchas cosas, he madurado muchísimo como persona y sobretodo he adquirido una ética de trabajo que no lo tenia antes.
Te fuiste siendo uno de los mejores anotadores del campeonato de España Junior, con un nivel muy alto. Cuatro años después de aquello, ¿consideras que eres mejor jugador?
Yo creo que sí. Estoy mejor físicamente, defensivamente mucho mas preparado y en ataque creo que he madurado en cuanto a la toma de decisiones. El hecho de que te vayas lejos de casa a los 18 años y tengas que convivir con la presión que supone tener esta gran oportunidad, que a la vez es una gran responsabilidad, hace que la persona se fortalezca mentalmente. Entiendo que esto ayuda en el día a día de un jugador.
Para los que apenas te vieron jugar en nuestro país, ¿cómo te definirías?
Me considero un 1-2 zurdo e intenso que puede defender y al que le gusta jugar mucho el bloqueo directo y con capacidad de leer las distintas situaciones que se generan en el, bien finalizando, asistiendo o encontrando la mayor ventaja. Pienso que tengo amenaza en el tiro con las consecuencias de todo tipo que esto genera en el 5×5
Base, escolta… ¿en qué posición te sientes más cómodo?
En Portland jugué mucho más de base que de escolta, y antes de irme a College of Idaho, estuve jugando de 1 con la sub20 Española. Aquí, este año he jugado más de 2 que de 1. La capacidad de poder llegar a jugar igual de cómodo en las dos posiciones es otra de las cosas importantes que me han dado estos cuatro años. En Portland por ejemplo, tuve que competir en cada entrenamiento con unos de los mejores bases de la NCAA, y esto, sin ninguna duda, ha repercutido mucho en mi mejora en el puesto de base.
¿Cómo ves el gran boom de llegada de jóvenes a estudiar, formarse y jugar en Estados Unidos?
Es normal que los chic@s estén interesados en esta oportunidad ya que no está fácil jugar a un alto nivel y estudiar al mismo tiempo en España. Creo que es una experiencia positiva a todos los niveles para los jugadores. Será un escaparate impresionante, jugarán ante miles de espectadores todas las noches y eso en España no lo ves. Los «student-athletes» son muy respetados en USA y la calidad de vida de ellos es inmejorable.
¿Cómo es un día compaginando estudios y deporte a alto nivel?
Tenemos muy poco tiempo libre durante el día, con clases y entrenamientos individuales por la mañana, y alguna otra clase por la tarde además de entrenamiento físico y de equipo… Hay que saber planificarse bien para tener éxito en clase y en la cancha. Esta disciplina adquirida es otra faceta en la que he mejorado mucho.
La NAIA probablemente es la gran desconocida en España, ¿Porqué el paso de NCAA Division I a NAIA? ¿Cómo es?
Cuando pedí el transfer desde Portland, tuve unas 10 becas completes de NCAA Division II y NAIA. También estaba interesada una universidad de NCAA DI, pero yendo a otra universidad de NCAA DI, tendría que estar un año sin jugar debido a la normativa, y no era lo que quería. No me importaba ir a una DII o NAIA. Quería ir a un sitio en el que tuviera entrenadores disponibles todos los días con mucha hambre por trabajar conmigo, y por supuesto, un sitio donde pudiera tener minutos de verdad. Esta es la forma en la que uno aprende y mejora, cometiendo errores y corrigiéndolos.
¿Qué concepto se tiene en Estados Unidos del jugador español y de nuestro baloncesto?
Los entrenadores cada vez reclutan más desde Europa. La importancia que están cogiendo los jugadores españoles tanto a nivel NBA como a nivel colegial hace que se cree una retroalimentación donde cada año el número de jugadores españoles que pasarán el charco incrementará. Sinceramente, pienso que respetan mucho el baloncesto español.
¿Y ahora qué? ¿Qué esperas de tu futuro baloncestístico?
No es fácil decir hoy que va a ser de mí como jugador de baloncesto. Una vez finalizado mi periodo universitario en donde el desarrollo deportivo ha ido de la mano del desarrollo académico y mi madurez personal, puedo decir que estoy preparado para intentarlo. Trabajo, esfuerzo, sacrificio forman parte de mi ADN. ¿Talento? No estaría bien que yo me definiese como talentoso pero pienso que sé de que va el 5×5 en una cancha de baloncesto. Algo de capacidad de generar puntos, dar asistencias y hacer mejores a mis compañeros tengo. Pero sobre todo muchas ganas de aprender y mejorar, de darlo todo para la franquicia que confíe en mí, sea en España o fuera de España.
Sigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
