Andrei Kirilenko ha anunciado, a través del periódico Sport-Express, su retirada. El ala-pívot ruso cuelga las botas a los 34 años tras una exitosa carrera. AK47, el talento que llegó del frío.
«Pongo el punto y final a mi carrera como jugador. Ya basta. He jugado mucho tiempo y con bastante éxito, pero ahora es mi momento para tener un rol diferente dentro del baloncesto», han sido sus palabras de despedida. ¿Próximo presidente de la Federación Rusa de basket?
Kirilenko aterrizó en la NBA con 20 años. Pasó una década en los Utah Jazz a las órdenes de Jerry Sloan (2001-11). En sus dos primeras temporadas compartió vestuario con los legendarios John Stockton y Karl Malone. La cota más alta alcanzada en el equipo mormón fue la final de la Conferencia Oeste de 2007, en la que perdieron ante los Spurs 4-1. Derek Fisher, Deron Williams, Carlos Boozer y Mehmet Okur le acompañaban en el quinteto titular.
Precisamente ese mismo año, Kirilenko logró su gran éxito con Rusia. ¡Campeones de Europa en el Eurobasket! La estrella respondió y fue nombrado MVP de una atípica final en la que los de Blatt batieron a España (59-60 con 17 puntos del espigado ala-pívot). El madrileño Palacio, congelado cuando el postrero tiro de Pau Gasol fue rechazado por el aro.
Con su selección nacional, además, logró dos medallas de bronces: en los Juegos de Londres’12 y en el Europeo de Lituania’11.
Tras aquella década en Utah, Kirilenko regresó al CSKA debido al lock out de la temporada 2011-12. La derrota en la final de la Euroliga en la F4 de Estambul ante Olympiacos (61-62) es, sin duda, la gran pesadilla de su palmarés. ¡Aquella canasta de Printezis!
Un año en Minnesota (2012-13, junto a Ricky) y una etapa con final tormentoso en los Brooklyn Nets (2013-15) fueron sus pasos hacia la salida de la NBA. El pasado 15 de febrero se anunciaba su regreso a Moscú. ¿Objetivo? Euroliga. Pero en la F4 de Madrid el equipo cayó en semifinales ante (otra vez) el Olympiacos.
Versátil, atlético, generoso en la cancha, Kirilenko siempre ha manifestado su amor por el basket y el deseo de devolverle lo que mucho que le ha dado aprovechando la cantidad de contactos que ha creado a lo largo de su carrera. No sería de extrañar que estemos hablando del próximo presidente de la Federación Rusa de Baloncesto, que en los dos próximos meses debe convocar elecciones.
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