La ‘aventura’ de Glen Davis en el Zadar ha terminado antes de empezar y de la manera más surrealista. Según informa Eurohoops, nada más aterrizar en Croacia el jugador estadounidense se descolgó pidiendo más dinero del que había pactado y, ante la negativa del club, se negó a salir del hotel para el partido contra el Cedevita. El KK Zadar se había reservado por si acaso la opción de anular el contrato a los dos meses, pero no habrá que esperar tanto
Según Eurohoops Glen Davis quedó decepcionado con la ciudad y quiso compensar con un contrato más alto. El jugador estadounidense intentaba volver al baloncesto de alta competición después de tres años apartado. Su último experiencia profesional había sido en 2015 contra Los Angeles Clippers. La temporada pasada había conquistado la Big 3.
Glen Davis dio una versión distinta a través de un vídeo en el que cargaba duramente contra el KK Zadar y su técnico, Ales Pipan.
«Quiero disculparme porque ha habido un malentendido. La razón de todo esto es que el Zadar tiene un montón de problemas internos, la organización es una mierda y, al final, al entrenador no le gustan sus putos jugadores. Grita, insulta y no voy a estar en un club como éste sin que me paguen, cuando sé el tipo de jugador de soy. Lo siento por todo lo que está pasando y que haya acabado así. Yo quiero jugar […] pero lo siento. Necesitáis un entrenador nuevo porque éste está tratando a los jugadores como si fueran una mierda. Nadie quiere jugar para él».
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