Francia y España volverán a escribir una página de su ya extenso libro de enfrentamientos en los últimos años el próximo miércoles (19:30 horas).
El choque de cuartos de final decidirá qué equipo pelea por las medallas en los Juegos Olímpicos de Río.
Tanto se conocen galos y españoles que para José Manuel Calderón se llega a un nivel casi familiar: “Nos falta saber los nombres de los padres y las madres de los jugadores franceses. Nos conocemos mucho, pero seguro que será bonito para todos”.
Además de por la clasificación, Calderón tiene motivos para estar contento. Ante Argentina (92-73), el jugador de los Lakers tuvo una aparición brillante en el choque, con 6 puntos en otros tantos minutos en el campo: “Estamos contentos por estar otra vez en unos cuartos de final. Era el primer objetivo, y se ha conseguido, aunque haya sido sufriendo. Estamos felices de poder estar aquí dos días más”.
España llega lanzada a los cruces con tres victorias consecutivas. El extremeño destaca la unión del grupo como una de las claves para cambiar el mal inicio de competición: “El equipo está bien, unido, haciendo las cosas mejor y ayudándonos en algunos errores que estábamos cometiendo”.