Kyle Kuric es uno de los nombres del año en el baloncesto español. Su repentina enfermedad, un tumor cerebral, mantuvo en vilo y pendiente a todo el deporte de la canasta
El escolta estadounidense, que está en Las Palmas completando su recuperación, recibía ayer el homenaje del Bilbao Basket antes de la semifinal y se encuentra en A Coruña acompañando a su equipo en una cita histórica: la primera final de Copa en la historia del Granca.
Hoy ya ha matado el gusanillo lanzando unos tiros en la tensa espera de la final. Esperamos verle pronto de nuevo en su hábitat, las pistas.