«Es una señal de identidad. Todos lo que estamos aquí, creemos en eso». Así hablaba Diego Ocampo de la filosofía de cantera del Joventut el día que el primer equipo confirmaba su salvación. Un día antes, el junior verdinegro había sido subcampeón de España.
Con Ocampo han debutado en ACB tres canteranos: el base macedonio Nenad Dimitrijevic, el alero Xabi López Arostegui y el pívot holandés Terrence Bieshaar. Pero la implicación del técnico gallego con la cantera verdinegra va más allá de dar oportunidades en la élite.
Esta semana, con el primer equipo de vuelta a los entrenamientos tras unos días de vacaciones, Ocampo ha asumido trabajo extra y ha dirigido sesiones también del júnior y del cadete B. «Gran experiencia para la cantera: gracias, Diego!», ha tuiteado la cuenta del basket base del Joventut. Y el técnico del júnior, Dani Miret, admite que «mola» ver a Ocampo dirigir a los chavales: «Implicación increíble».
Una aportación que sirve de complemento para el trabajo que hacen los técnicos de la base y que Ocampo elogió a final de temporada: «En la formación del jugador es importante todos los que le ayudan. Es un trabajo de mucha gente. La enhorabuena es para todo el club».
«Lo importante no es el resultado, lo más importante es como hacen las cosas. Los he visto entrenador y jugar alguna vez, no tantas como me gustaría, pero hay jugadores que han mejorado, sobre todo personalmente. Y no solo es meter triples. Para ser profesional, hay que mejorar personalmente. Desde un punto de visto externo, han hecho un muy buen trabajo todos los que están con estos chicos», concluyó entonces Ocampo.
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