Los derbis siempre son especiales. Tienen ese punto diferente por el que la gente se engancha a la pantalla o acude al pabellón, independientemente de la época del año o la situación de uno y otro equipo. Real Madrid y Movistar Estudiantes son dos conjuntos históricos, por lo que siempre apetece ver un choque entre ambos.
En esta ocasión, el Real Madrid llegaba con la moral por las nubes tras clasificarse para la Final Four de la Euroliga dos días atrás, mientras que el equipo colegial buscaba aprovechar el cansancio de los blancos para seguir soñando con los playoffs de la liga Endesa.
El duelo tenía pinta de estar reñido, pero nada de eso. Los madridistas se pasearon como Pedro por su casa. El primer cuarto fue igualado, pero después la balanza se desequilibró descaradamente en favor de los hombres de Pablo Laso.
La intensidad en la pintura, el dominio del rebote y el acierto ofensivo del Real Madrid enterraron toda esperanza de los colegiales, que solo pudieron observar como el líder de la tabla lograba una nueva victoria en el casillero. El resultado final fue de 75 a 92 en favor del Real Madrid.
Dato del partido: Sergio Llull volvía a la Liga Endesa después de su lesión
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