Todos los focos de la ACB apuntan hacia el mismo lugar. “La cultura del Esfuerzo” parece que ha explotado en el año donde muchos menos lo esperaban. Viendo a un Real Madrid que lo había ganado todo, y un Barcelona Lassa que se reforzó, y mucho, para competir con los blancos, pocos podían pensar que el liderato al final de la primera vuelta no estuviera o en la capital o en la ciudad condal. Valencia Basket ha termina la primera vuelta como el indiscutible líder.
Sólo una vez en la historia un conjunto había conseguido hacer una vuelta entera con un ‘rosco’ en derrotas. Y no fue hace mucho. Un Real Madrid en plena efervescencia, con Mirotic empezando a dar pasos hacia la NBA o ‘Chacho’ Rodríguez volviendo a ser el mismo que antes de irse a la competición norteamericana, terminó invicta la primera parte de la temporada 2013-2014.
Muchos pensaban que el conjunto de Pablo Laso acabaría desfondándose y cayendo ante rivales por aquel entonces de más entidad. Sucedió a medias. Los madridistas ganaron la Copa del Rey y perdieron la liga ante el Barcelona Lassa. ¿Se acuerdan de aquella mágica canasta de Llull en Málaga?
El Olympiakos dejaría a los blancos también sin título europeo. Precisamente, el camino del Valencia Basket esta temporada se inició en la competición doméstica ante el equipo madridista. Con una victoria en el Barclaycard Center se inició el recorrido hacia la perfección, que ha terminado, en su primera vuelta, con un triunfo en el Palau en la prórroga.
Quién sabe hasta dónde llegará la aventura del Valencia Basket esta temporada. De momento, su imbatibilidad la ha frenado el Limoges en Europa. Pero, después de tanta comparación con los Warriors, puede ser incluso bueno haber perdido un choque para seguir soñando. De momento, ya tienen un referente en quién fijarse.
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