A falta de cuatro jornadas para el final de la liga regular, el ICL Manresa era el primer equipo que confirmaba matemáticamente su descenso, tras perder 91-75 con el Unicaja. Un desenlace que, no por esperado, fue menos traumático.
El entrenador del conjunto manresano, Ibon Navarro, visiblemente afectado, valoraba así la derrota, el descenso matemático y el futuro del club:
(Confirmación del descenso) «Hay alguna cara más baja hoy que otros días, pero no queremos ningún drama. El drama nos va a venir de fuera y es normal. Es una situación que teníamos bastante asimilada porque no dependía de nosotros. Evidentemente no hemos descendido perdiendo hoy en el Carpena. Seguimos en la línea de intentar mejorar».
(Capacidad de supervivencia) «Me duele por la afición, me duele por el club, me duele por los trabajadores del club, porque no es un trago fácil. Pero está la incógnita de lo que va a pasar. Este club ya ha pasado por ahí y está vivo. No veo ningún motivo para que no vuelva a estar y no siga vivo».
(Lamento) «No creo que sea una cuestión de pedir perdón porque no nos ha faltado ni trabajo, ni esfuerzo, ni dedicación, ni energía en el intento. Hemos tomado malas decisiones porque esto es deporte. No hemos tomado las mejores. Nos ha podido todo. Muchos hablan del partido de Obradoiro, si no nos llegamos a caer al suelo, no empatan y vamos a la prórroga y perdemos, todo podría haber sido diferente. O no. Lo único que les podemos decir es que lo sentimos, y que el equipo hasta el último día va a trabajar como lo ha estado haciendo, es cuestión del compromiso del equipo».
(Asimilado) «La afición, desgraciadamente, no se va a llevar una sorpresa. El luto ya lo ha estado llevando las últimas semanas».
(Futuro de la ACB) «Lo justo es que quien se gane algo, lo tenga. Pero la situación económica de la ACB, el tema de los canons, lo que es justo o no es justo. No soy juez ni quiero ser parte».
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