El Campus de baloncesto Gigantes de verano tendrá la visita muchos jugadores. Uno de ellos será Jaime Fernández, que conoce muy bien lo que es ir a este tipo de actividades. “Yo fui a uno cuando era pequeño y tuve la suerte de que algunos entrenadores del Estudiantes se fijaron en mí. Me sirvió para mejorar mucho el tiro, la técnica y el bote”, cuenta Jaime Fernández a Gigantes.
“Lo importante de los Campus es que los chavales se lo pasan muy bien y así no se aburren en verano. Tienen muchas actividades para disfrutar. Los más pequeños que no conocen el baloncesto, les sirve para aprender los primeros pasos con entrenadores. Y lo que ya saben pues parar mejorar sus cualidades y compartir entrenamientos con otro compañeros. Es el aprendizaje perfecto”, sigue explicando el base del equipo colegial.
Jaime Fernández, en su tercera temporada con la primera plantilla del Movistar Estudiantes, ha conseguido por fin tener una regularidad en su juego. Sus promedios hasta el momento son 8,4 puntos y 1,9 rebotes y 2 asistencias. “Está siendo mi mejor campaña. Estoy teniendo mucho minutos y me veo con confianza. He mejorado mi rendimiento”.
Pero el madrileño no se conforma con esto: “Puedo hacer mejores partidos. Quiero ayudar al equipo a conseguir más victorias. Falta mucho para ver al mejor Jaime Fernández”.
Además, su compañero de posición Javi Salgado se lesionó hace un par de semanas y se quedó sólo como base del primer equipo. Aunque ha contado con la ayuda de Joan Creus del filial. “Me resulta un poco raro porque no estaba acostumbrado a jugar tantos minutos. Es de las primeras veces que juego 30 minutos por partido o más. Aunque hago las mismas cosas ir al máximo en cada jugada. Pero claramente quiero que Javi Salgado pueda volver cuanto antes”.
A Jaime Fernández le costó demostrar toda la calidad que lleva dentro en temporadas anteriores y no pudo responder a lo que se esperaba de él. ¿Le afectó la presión? “Siempre intento llevar bien lo de jugar con ella. Pero noto más la presión que me meto yo mi mismo”.
El base a sus 21 años todavía tiene algo pendiente: “Ir a la Selección Española es un sueño que espero que se ha realidad alguna vez. Pero para eso queda bastante y mi puesto está muy bien cubierto en el equipo nacional”.
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