El Urbas Fuenlabrada es, con el permiso de Álex Mumbrú y esa máquina de ganar partidos llamada Surne Bilbao Basket, uno de los equipos de moda en la Liga Endesa. Los fuenlabreños arrancaron la temporada con un balance de 2-9, algunos problemas de lesiones (Leo Meindl) y salidas de jugadores (Sean Armand) que les hacían no terminar de carburar. Ziga Samar
Pero se han hecho fuertes desde el mes de diciembre con un balance de 5-2 y habiendo estado un mes sin competir por los aplazamientos. Emegano ha aportado la anotación exterior que era necesaria antes de su lesión, Alexander se ha hecho fuerte bajo los tableros, Cheatham aporta tiro exterior y Novak despunta desde la dirección. Y, sobre todo, Ziga Samar.
Con 21 años recién cumplidos el base esloveno ha sido una de las claves en la reacción fuenlabreña tras pasar algunos problemas físicos (espalda) en el arranque de la campaña. Su rol ha cambiado notablemente, pasando de ser un jugador enfocado principalmente en la defensa de los bases rivales a ser uno de los directores de juego más consistentes de la Liga Endesa. Aterrizó en Fuenlabrada con 19 años para jugar en LEB Plata con el CB Zamora y se ha abierto camino hasta llegar al primer equipo.
https://www.youtube.com/watch?v=wOBAAR7ar6w
Los datos de Samar desde el ecuador de la primera vuelta son espectaculares. Desde la jornada 9 de la Liga Endesa, cuando valoró 15 en Murcia sus números son los siguientes:
- 2º base más valorado tras Jayson Granger (15.2)
- Top 5 en asistencias por partido (5.8)
- 1.4 recuperaciones por partido (al nivel del top 3 de la Liga Endesa)
- 3º en rebotes entre los bases (3.4 tras Renfroe y Calathes)
Es decir: 9 puntos, 3.4 rebotes, 5.8 asistencias y 1.4 robos para 15.2 de valoración media en los últimos 10 partidos. Una evolución meteórica que poco tiene que ver con los 3.1 puntos, 1.8 asistencias y 1.3 rebotes que promediaba la pasada campaña en apenas 10 minutos de media o el arranque de esta misma campaña. En la 21/22 apenas está superando los 20 minutos de media por lo que su techo todavía está muy alto. Y empieza a llamar la atención no solo en Europa, también en Estados Unidos.
Acaba de compartir @DraftExpress este vídeo de Ziga Samar, base del @BFuenlabrada. El esloveno acaba de cumplir 21 años y en mi opinión es uno de los bases con más proyección de Europa. Tiene una mezcla potente: talento, físico, defensa y creatividad.pic.twitter.com/PXJTT8YoyV
— David Sardinero (@davidsardinero) February 2, 2022
Aunque si hay un dato para medir el desempeño de Samar como playmaker son las asistencias por pérdida. En ese apartado el base del Urbas Fuenlabrada es el mejor de toda la Liga Endesa repartiendo 4.375 asistencias por cada pérdida que comete. Solo Hanga y Birgander tienen sus marcas en 4 o mejor. Samar ha repartido 70 asistencias en lo que va de temporada y solo ha perdido 16 balones. Jugadores como Guillem Vives (3.5), Omar Cook (2.9), Dani Pérez (2.7) o su compañero Jovan Novak (2.6) no se acercan a esos registros en ese apartado a pesar de estar entre los mejores de la Liga Endesa. De los 35 mejores pasadores de la Liga Endesa es el único junto a Laprovittola (27º) que no pierde más de 1.1 balones por partido. Él está en el 6º lugar. Una efectividad extraordinaria.
Una nueva arma en el arsenal
Pero regresemos de nuevo al mes de noviembre. Cuando se habían disputado las 9 primeras jornadas de Liga Endesa, Ziga Samar llevaba 0 triples anotados. No es que fuese un tipo de lanzamiento en el que estuviese desacertado, es que no lo intentaba. El esloveno llegaba a esa jornada no habiendo intentado ni un solo tiro desde más allá del 6.75 y ante UCAM Murcia intentó sus dos primeros fallando ambos.
Desde ese partido acumula 11 de 20 en triples. Para un jugador muy activo en el pick&roll para encontrar a Alexander y en el pick&pop para buscar a Cheatham, la amenaza desde la larga distancia se hacía fundamental y ha ido mejorando en ese apartado. El 50% que acumula en la temporada le coloca en el 5º lugar de la Liga Endesa en porcentaje aunque sin aparecer todavía en el ranking por el bajo volumen de lanzamientos que, sin embargo, no deja de crecer. Otra amenaza para su arsenal.
Todavía le quedan cosas por pulir. Evitar cargarse de faltas en algunos partidos ante la presión que ejerce sobre los bases rivales, mayor capacidad para producirse sus propios tiros, especialmente haciendo valer sus casi 2 metros de estatura… Pero el trabajo y la evolución son más que notables. ¿Dónde está el techo de Ziga Samar?
acb Photo // A.Pacheco
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