El ICL Manresa puede confirmar este miércoles, si pierde en la pista del Unicaja, su descenso deportivo a la LEB Oro. Algo que ya ocurrió las temporadas 2012-13 y 2013-14. Sin embargo, en esas dos ocasiones, el club se salvó en los despachos. Una opción que, si se elimina el canon de acceso a la ACB, parece menos probable.
«No se sabe demasiado hacia donde irán las cosas y esta falta de información es difícil de asumir», asegura el capitán del Manresa, Román Montañez. «No saber qué pasará el año que viene con el canon, si podrán subir los equipos que obtengan el ascenso de la LEB o si lo harán los que bajan, si se les invitará… No tener esta información para el club también es complicado».
«Espero que todo salga de la mejor manera posible», añade el escolta catalán. «Pero entiendo que el cambio que se está intentando dar a la liga es bueno para la competición porque los equipos que logran el ascenso deportivo tienen derecho a subir. Veremos qué pasa. Esperamos que se resuelva lo antes posible para saber dónde está el club».
Montañez admite que un descenso podría ser duro para el Manresa: «En la LEB, todos los patrocinios y sponsors no serían los mismos. Si este dinero no es el mismo, costaría un poco más. Subir de la LEB no es fácil. Es una liga competitiva, y más si se quita el canon, porque habrá más equipos que querrán optar a ello».
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