In extremis y con polémica caía el Laboral Kutxa (68-66) en el Palacio de los Deportes de Murcia.
68-65 en el marcador y dos tiros libres para Kim Tillie a poco más de un segundo del final del partido. El internacional francés mete el primero y lanza a fallar el segundo. Shengelia captura el rebote ofensivo y mete sobre la bocina la canasta que hubiera mandado el partido a la prórroga. Los árbitros consultan el instant replay y anulan la canasta.
Un final no apto para corazones sensibles… @UCAMMurcia 68-66 @Baskonia.https://t.co/7IpAq2IXN5
— Movistar+ (@movistarplus) enero 31, 2016
La actuación de Hierrezuelo, Sánchez Monserrat y Caballero no dejaba nada contento a Velimir Perasovic que reclamaba ya sobre el parquet en la acción final de Shengelia una falta de Campazzo. Después lo reiteraba en rueda de prensa.
«Al final nuestra protesta sobre la falta es porque es muy clara sobre Shengelia. Un árbitro lo pita y luego lo anula porque está fuera de tiempo. No sé si es fuera de tiempo o no, pero es una falta muy clara. Sobre todo las dos últimas faltas sobre Bourousis debajo de la canasta. El ambiente pudo con los árbitros. Es algo que no podemos controlar. UCAM Murcia no tiene nada que ver en esto, todo lo contrario. Yo les felicito y creo que han jugado sus bazas muy bien, un partido duro, con pocos puntos y nosotros no teníamos velocidad y frescura suficiente para romper el partido antes”, dice el entrenador croata.
Resignado, Perasovic asumía la derrota sin querer ahondar demasiado en la labor arbitral: “No quiero hablar demasiado de esto. Tenemos que mirar nuestros errores porque el equipo podía ganar el partido antes. Cuando ganas de 7 y quedan 3 minutos y medio tienes que saber sacar partido. Evidentemente no hemos sabido. Hay una sensación de que el partido se ha endurecido y en este endurecimiento hemos salido perjudicados o no hemos sabido responder”.
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