La Fortitudo Bolonia reverdece laureles en la Segunda División Italiana compartiendo Conferencia Este con ciudades míticas del baloncesto transalpino como Treviso, Imola, Verona, Trieste o Roseto.
En sus filas cuenta con todo un ex ACB como Marco Carraretto (Baskonia y Breogán) que sigue en activo a sus 38 años y el entrenador es Mateo Boniciolli, ex de Avellino, Roma, Teramo, Oostende (Bélgica) o Astana (Kazajistán), que cumple su tercera etapa en el club.
En la última jornada, la séptima, perdían por 71 a 59 en la cancha del decimosexto clasificado, el Matera. Y el técnico tomó una medida cuanto menos sorprendente en el baloncesto profesional.
“Después del partido no habíamos cenado, pero nos fuimos al hotel y tuvimos una reunión de dos horas revisando de partido que habíamos hecho en el campo. El equipo cenará cuando pruebe que lo merece. merecerlo. Comer es un asunto serio y tiene su valor. Cuando se es presuntuoso y se juega como lo hemos hecho se demuestra que no se respeta ese valor y entonces no se tiene derecho a comer”, dice Boniciolli en declaraciones al Resto del Carlino recogidas por Bolognabasket.it.
“No tenemos la madurez para jugar decentemente lejos de nuestra casa, por lo que saltarnos la cena espero nos sirva a todos. De lo contrario tomaremos otras medidas”, concluye.
El Eternedile Bolonia es décimo de su grupo con un balance de 3 victorias y 4 derrotas.
