El excéntrico propietario del Panathinaikos, Dimitris Giannakopoulos, ha dado por finalizada la guerra con el Olympiacos… o eso parece.
En una entrevista a Sport24.gr parece haber apartado las tensiones con los hermanos Angelopoulos mostrando una nueva cara.
“Cuando llegué a ser presidente del Panathinaikos, en el verano de 2012, tenía toda la voluntad de mantener nuestra rivalidad con el Olympiacos entre las cuatro líneas de la pista. Eso es lo dije en mi primera entrevista por aquel entonces. Por desgracia, después del ataque espontáneo de los propietarios Olympiacos cometí algunos errores yo mismo. A veces, me dejé llevar y esto se volvió contra mí”, dice.
“Las rivalidades se deben limitar a los 40 minutos de juego, no en comunicados de prensa, ante las cámaras…En el Panathinaikos nunca hemos buscado fantasmas ni hecho enemigos. No tengo ningún problema personal con nadie”, continúa.
Y es que Giannakopoulos invita a Panagiotis Aggelopoulos, su homólogo en el Pireo, a solucionar sus diferencias en un 1 contra 1.
“No estoy bromeando y no quiero ofender a nadie. Debemos enviar un mensaje a los seguidores a través del baloncesto, el deporte que tanto nos gusta. Tenemos que mostrar que no tenemos diferencias fuera de la cancha. Si él tiene algún problema personal lo solucionaremos de esta manera. Es una invitación, no un desafío”, asegura.
¿Será la definitiva?