Una de las imágenes de la jornada en la Liga Italiana la hemos vivido en el partido entre Varese y Milán.
Los locales empiezan el choque a remolque y el público del PalaWhirlpool trata de empujar a los suyos.
3:30 para el final del segundo cuarto con 18-34 en el marcador. El Milán falla su ataque y Repesa insta a los suyos a que bajen a defender metiéndose en el centro de la pista.
El entrenador del Varese, el ex jugador Paolo Moretti, advierte a los árbitros de la situación mientras su equipo mete canasta y se monta el lío. Los dos entrenadores se lanzan insultos desde los banquillos y Moretti, incrédulo, es descalificado.
Pero hay más, cuando el entrenador local abandona el parquet se para junto a Repesa en el banquillo visitante e intercambian palabras. ¿Qué se dirían? Seguro que nada bonito…