Cada semana que pasa, Naji Marshall tiene más pinta de continuar su carrera en la NBA. El alero de Xavier es una incógnita para muchos ojeadores, pero sus actuaciones en la liga universitaria están despejando las dudas que se ciernen sobre su figura.
Esta campaña, en ocho partidos disputados, ha promediado 13.1 puntos, 7 rebotes y 3.5 asistencias. Buenos números que le van colocando en la primera línea de la NCAA. Desde Gigantes, hemos contactado con él para conocer un poco mejor su historia.
«Crecí en Atlantic City, me encantaba jugar al baloncesto todo el día, todos los días. Mi infancia fue bastante aburrida y normal, nada fuera de lo común», nos cuenta Naji, quien desde pequeño fue un gran amante del deporte que ahora domina. «El baloncesto significa todo para mí. Me encanta el juego y lo uso para llevarme a lugares en los que nunca he estado y para motivar a la gente de donde soy, para mostrarles que hay una salida», explica. La llave para cambiar su vida y vivir de la pelota naranja está muy cerca de su casa, y tiene el talento necesario para cogerla.
Naji y Xavier han comenzado la temporada en buena forma, y ambos esperan continuar así. Su tope no lo saben ni ellos mismos. «Podemos ir tan lejos como queramos, se trata de nosotros y de cómo salimos cada noche y competimos», dice el alero de segundo año. Incluso, de seguir así, podría presentarse y salir elegido en el próximo Draft de la NBA, algo que no le preocupa, todavía, demasiado. «Ese es el objetivo, pero ahora me estoy enfocando en la campaña. No sé qué me deparará el futuro, pero llegará mi hora», comenta confiado.
En persona, Naji es un tipo simpático, aunque reservado. «Si no te conozco, no suelo decir nada, pero si te conozco, entonces soy un tipo gracioso, genial. Como jugador de baloncesto, soy un jugador enérgico que puede hacer jugadas en ambos extremos de la pista y alguien que ama el baloncesto», añade.
A pesar de su corta edad, Marshall ha vivido grandes momentos en el mundo de la canasta. «Mi mejor momento fue ganar el Campeonato Big East el año pasado por primera vez en la historia de la escuela. Mi peor momento fue perder ante Florida State en el torneo de la NCAA», comenta. Naji es un tipo sencillo, un tipo que antes de saltar a la cancha solo hace una cosa: «¡Solo rezo, ya que no soy nada en absoluto sin DIOS!», dice Naji.
Con todo esto, nos podemos hacer una idea más nítida de su persona, pero para entrar en profundidad en su análisis dentro de la pista, Jordi Alfonso (The Wing) nos trae un repaso completo de sus características.
Su juego
El esquema de Xavier no entiende de posiciones estrictas, por lo que podríamos decir que Naji Marshall ha jugado como escolta, alero y ala-pívot en los Musketeers. Sin embargo, de cara a la NBA encaja más en el molde de alero por su combinación física de altura, peso y atletismo.
En términos de juego, Marshall ha dado un salto de calidad desde su año freshman al sophomore, aumentando su incidencia en el juego en forma de tiros y balón en las manos. Cuando tiene la pelota se encuentra cómodo, tiene un manejo sólido que le permite jugar con el balón en las manos y no ser un simple ejecutor. Aun así el sistema de Xavier se basa en el movimiento constante de balón, por lo que tampoco es un organizador al uso.
En cuanto a recursos Marshall es un jugador que aprovecha muy bien su tamaño y agilidad para llegar al aro y definir gracias a su envergadura, la cual complica al rival taponar sus tiros. Normalmente estas penetraciones llegan con balón en las manos (gran uso del P&R, pasando muy cerca del interior y facilitando que el rival se quede enganchado o salga perjudicado), ya que trabaja mejor que sin él (falta de movimientos corporales que le otorguen espacios y poco uso en bloqueos indirectos).
En defensa sufre ante jugadores que sepan moverse bien, ya que cae en fintas corporales y bloqueos indirectos con facilidad. Sin embargo, su físico le permite defender tanto a escoltas como aleros, pues puede seguirlos por velocidad y aguantarlos por envergadura y peso.
Sorprendentemente es un jugador muy vocal, ya que organiza a su equipo atrás, tanto en transición como en estático. En cambio, a la hora de hacer él mismo las ayudas, no se muestra muy activo pese a contar con espacios suficientes como para dificultar el ataque rival. Su capacidad para rebotear es buena, combinando tamaño, standing reach (brazos en alto) y agilidad suficiente para atacar el balón aunque salga disparado por encima de él.
Naji Marshall es un jugador con un físico interesante que le otorga un skill set coherente a su cuerpo, pues sabe utilizarlo tanto en ataque como en defensa. Sin embargo, debe pulir aspectos tan importantes como el tiro o la defensa, incidiendo en las situaciones off the ball en ambos lados de la pista. Un año más en Xavier podría sentarle bien de cara a pulir su juego y optar a ser drafteado con mayor seguridad de la que transmite actualmente.