Los Bulls se han estrenado en casa con derrota ante los Spurs (77-87) y antes del choque ha comparecido ante los medios Bobby Portis, suspendido con ocho partidos por el puñetazo que le dio a Mirotic. “Me equivoqué con lo que hice”, dice el ala-pívot estadounidense sobre la acción que mandó al internacional español al hospital.
“Quiero pedirle disculpas públicamente a Niko. Siento que he defraudado a los fans, a la organización de los Bulls y, sobre todo, a mis compañeros de equipo. Esto no es lo que es Bobby Portis”, asegura el interior que reconoce que “me sorprendió mi propia reacción porque eso no es lo que soy. Soy un competidor. Pero nunca quise herir a mi propio compañero de equipo».
Portis quiere asegurarse de cara al futuro que “Niko y yo estemos genial y que podemos ser compañeros de equipo otra vez. Estoy bastante seguro de que podemos. Solo tenemos que reparar la relación”. Pero de momento ha tratado de ponerse en contacto con él sin obtener respuesta: “Le escribí, le llamé, pero no me ha contestado”.
El técnico de los Bulls, Fred Hoiberg, le ha quitado hierro al asunto asegurando que “lo importante es que Niko vuelva a estar sano. Todavía está muy dolorido. Con suerte, volverá a sentirse bien pronto”.
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