«Pensamos que no era justo. No hace nada a propósito. Queríamos ganar por él», explicaba Jrue Holiday después de la victoria por 114-107 de los Pelicans ante los Thunder.
Entre Holiday, autor de 18 puntos, y Anthony Davis, que se fue a los 36 y añadió 15 rebotes, se encargaron de ‘vengar’ la expulsión de DeMarcus Cousins, que se fue al vestuario mediado el tercer cuarto por un codazo a Russell Westbrook.
¿Falta o Flop?
DeMarcus Cousins es expulsado del partido por esta falta hacía Russell Westbrook. #NBA pic.twitter.com/kkAe35LlSV— All Sport News (@All_SportNews) 21 de noviembre de 2017
«Fue duro perderle, siendo una de nuestras estrellas, pero todo puede pasar en un partido. Los chicos dieron un paso al frente, preparados para jugar», apuntaba Davis.
Ni con una de las estrella del rival fuera de juego pudieron ganar los Thunder, que desperdiciaron una ventaja de 19 puntos al inicio del partido (25-6). Westbrook, que acabó con 22 puntos, 16 rebotes y 12 asistencias, además de 13 tiros fallados de 19 intentos, lamentó los «errores mentales» que costaron la derrota a OKC.
Ni su triple-doble, ni los 26 puntos de Paul George, ni los 19 de Carmelo Anthony bastaron. «Somos demasiado buenos como para dejar a otro equipos empatarnos tras una diferencia de 20 puntos», apuntaba George.
