No es una historia inventada. A veces la realidad supera a la ficción. Sobre todo en la NBA. En Chicago, Detroit Pistons sumó su victoria número 16 de la temporada. Hasta ahí todo puede parecer normal. Lo increíble, que se produjo tras ¡68 minutos de juego! Cuatro prórrogas, y 298 puntos, para que los de Stan Van Gundy se llevaran la victoria por 147-144.
Lo hicieron a pesar de los 43 puntos, marca personal esta temporada, de Jimmy Butler. El alero de Chicago registró 14/16 desde la línea de personal, muy bien acompañado por su otros lugartenientes en el equipo de Fred Hoiberg. El español Pau Gasol llegó hasta la treintena, (30 puntos), además de 15 rebotes y 5 tapones. Por su parte, Derrick Rose firmó 34 tantos. Más de 100 puntos entre los tres, que no fueron suficientes…
… Porque los de Detroit sumaron una actuación más coral para vencer tras acercarse al récord de tiempos extra en la NBA. Se jugaron seis en un partido de 1951 entre Indianapolis Olympians y Rochester Royals.
En los Pistons sobresalieron André Drummond y Reggie Jackson. El pívot logró 33 puntos y 21 rebotes y el base, 331 y 13 asistencias. También contribuyeron Caldwell–Pope, con 17 tantos, y Stanley Jonhson, con 16, en un partido increíble. Una historia difícil de contar. La de un choque que estuvo cerca de no acabar.
Revive la locura que se vivió anoche en el United Center. ¡Cinco finales de partido en el alambre! En el primero, Rose falló el tiro para ganar… ¿Y en los otros cuatro? Tres horas y 24 minutos de partido. ¡Impresionante!
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