En casi 30 minutos en la pista, Matt Barnes no estaba cuajando un extraordinario partido con su equipo, los Memphis Grizzlies, frente a Detroit Pistons. Llevaba cinco puntos anotados. Todo cambió en cuestión de segundos. El alero, fichado esta temporada por la franquicia de Tennessee, ‘robó’ la victoria del Palace de Auburn Hills con un triple imposible. Sólo así se puede explicar cómo la mete desde ¡medio campo! A falta de menos de un segundo para el final.
El increíble triple final de Matt Barnes. ¡Alucina!
El equipo local, Detroit Pistons, no pudo anotar en la última acción y los Grizzlies se llevaron su victoria número 13 de la temporada por 92-93. Barnes aún no terminaba de creerse su acción al final del choque. «Fue una locura, un golpe de suerte para meterla y ganar el partido”. Su entrenador, Dave Joerger, fue más irónico todavía. “Ejecutamos muy bien. El objetivo era lanzar con 4 segundos desde media cancha», bromeaba el entrenador visitante.
Lo cierto es que Memphis se llevó una victoria con un alto porcentaje de suerte que le vale para recuperar la senda positiva de la victoria. La última derrota, por 37 puntos de diferencia, frente a Oklahoma City Thunder, dolió, y mucho. Quizás aún ‘escocido’’ por ese mal choque de su equipo, Marc Gasol se ‘salió’, y eso que jugó lesionado, con un esguince de tobillo que arrastraba del choque ante los Thunder. Anotó 19 puntos, y capturó 12 rebotes, para mantener con vida a los Grizzlies en el partido.
El primer cuarto de los chicos de la ciudad de Elvis fue notable (24-17), pero en el segundo se hundieron (19-30). De ahí al final, los Pistons llevaron el control del choque, pero no llegaron a marcharse en el marcador. Ahí cavaron su propia tumba. Los mejores en los locales fueron André Drummond y Reggie Jackson, ambos con 18 puntos anotados. El pívot, además, capturó 19 rebotes.
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