Los Bucks son uno de los proyectos jóvenes que con más ganas se ven en la NBA a día de hoy y en Milwaukee no quieren perder la oportunidad de ver a Giannis Antetokounmpo, cada día más cerca de ser MVP, y a sus compañeros.
Esta temporada, con el reputado Mike Budenholzer al mano, quieren dar un paso más. Y, por lo que se ha conocido hace poco, no lo harán solos.
Los Bucks estrenan un nuevo pabellón este 2018, el Fiserv Forum. Eso, junto a lo que la gente de Wisconsin espera del equipo con el talento joven que atesora, ha hecho que la franquicia bata el récord de abonados que marcó hace ahora 30 años (1988/89). En aquella ocasión fueron 8.985 personas las que pagaron el abono de temporada y ahora se ha derribado la barrera de los 10.000, como publica Darren Rovell en ESPN.
Para una franquicia que no acaba de romper esto supone un verdadero espaldarazo para las aspiraciones futuras, tanto a nivel empresarial como de popularidad dentro de la NBA.