Uno de los equipos de la NBA que más apuesta en sus plantillas por perfiles de todo el planeta es San Antonio. En el roster de los Spurs de Gregg Popovich no suelen faltar jugadores internacionales, habitualmente dando resultado al conjunto texano.
En declaraciones a Gazzetta, portal de baloncesto griego, el técnico explicaba el origen de su flechazo con Europa y elogiaba a los jugadores del viejo continente. «Están capacitados. Hay muy buenos jugadores por todo el mundo. Estuve en el Europeo de Alemania, en el 88. Fui al torneo, todavía era asistente, y el único entrenador que había allí era Don Nelson», cuenta.
«Fui a los partidos, a alguno de Rusia, la Unión Soviética por aquel entonces, de Yugoslavia, con Radja, Kukoc y todos esos jugadores. Me sentí como un niño en una tienda de chucherías. ¿Dónde estaban todos esos tíos? ¿Dónde están jugando?», relata.
El entrenador de los Spurs afirma que «allí es cuando me dí por primera vez cuenta, empezamos a traer jugadores europeos y pronto quedó claro que la experiencia que tienen por todo el mundo y cómo aman el basket, como mucha gente de allí, envuelve todo: muchas cosas de las que hablar y un entorno más rico».
Sobre si este conocimiento del basket europeo le puede ayudar como seleccionador de Estados Unidos, Popovich bromeaba: «En la Selección no hay europeos. Alguno querría, pero no puede. Y bueno, yo estaba en el staff en 2004 y perdimos contra Argentina. Ginobili era de los Spurs y nos destrozó».