Los Warriors parecen abonados a las remontadas, y Green a la polémica. La ecuación volvía a encajar anoche en el triunfo del conjunto de Steve Kerr a los Wizards. Golden State remontaba hasta 15 puntos de diferencia en la segunda mitad, tras una primera parte de color visitante que terminaba con Draymond expulsado por una pelea con Bradley Beal.
El ala-pívot del conjunto de La Bahía, que lleva envuelto en situaciones de este tipo desde su llegada a la Liga, es por ende un ‘sospechoso habitual’. La acción tenía lugar casi al final del segundo cuarto, cuando en la lucha por un rebote ambos se enzarzan, caen al suelo y obligan a compañeros de ambos equipos a acudir al rescate, formando una especie de ‘tangana’ multitudinaria en el que alguno más sale afectado.
En defensa de Green, quien inicia la trifulca en este caso, al menos aparentemente, es Bradley Beal. El jugador de los Wizards agarra a Draymond por detrás y le ‘engancha’ por el cuello, lo que provoca la reacción del ala-pívot, que se revuelve y forma todo el tumulto. En este tipo de acciones en la NBA no hay vencedores, sólo vencidos, y ambos eran expulsados de forma inmediata.
«Ha sido una trifulca. No voy a dar más detalles. Lo haré mañana con la Liga. Se nos fue de las manos y fuimos expulsados. Le dije a mis compañeros que no me puedo meter en situaciones así y abandonarles en la batalla ante un equipo duro», comentaba Beal tras el encuentro.
Más directo era Draymond Green, que en declaraciones recogidas por la ESPN afirmaba que «no sé lo que se supone que tengo que hacer si una persona me golpea dos veces. Cuando eres un niño te enseñan a no permitirlo. ¿Qué se supone que tengo que hacer?».
Para el ala-pívot, «hay una historia conmigo y la NBA. Es la única razón por la que pienso que he sido expulsado». Green, al menos, provocaba la reacción de los suyos en la segunda mitad. Tras una horrorosa primera parte, los Warriors le daban la vuelta al choque en los últimos 24 minutos.
Los de Kerr se imponían por un resultado de 120 a 117 (parcial de 33-20 en el último cuarto). Ni Curry (2o puntos y 3/13 en T3), ni Klay Thompson (18 puntos), tenían una noche especialmente brillante, y era el veterano David West, con 16 tantos, quien secundaba los 31 de Kevin Durant.
El ex de los Thunder anotaba un triple clave en el último minuto que ponía a los Warriors 5 arriba, y a pesar de los intentos de Otto Porter Jr., que brillaba con 29 puntos y 10 rebotes, la victoria se quedaba en La Bahía.
La NBA ha hecho oficial las sanciones por el altercado con suspensiones de un partido para Morrris y Felix y las siguientes multas económicas: 50.000 dólares para Beal, 25.000 para Green y 15.000 para Oubre.
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