NBAEstás viendo//Guía NBA 2017/18: Oklahoma City Thunder, por Andrés Monje
Guía NBA 2017/18: Oklahoma City Thunder, por Andrés Monje

Guía NBA 2017/18: Oklahoma City Thunder, por Andrés Monje

Memoria 2016-17
Balance: 47-35. Sextos del Oeste. Eliminados en Primera Ronda (Houston, 4-1)
Eficiencia Ofensiva Ritmo Eficiencia Defensiva
105 (17º) 99.3 (9º) 105.1 (10º)
Ataque 4 Factores Defensa
50% (24º) % efectivo en tiros 51.1% (13º)
29.5% (4º) Tiros libres 28.5% (22º)
14.8% (24º) Pérdidas 13.7% (20º)
27.9% (1º) Rebote ofensivo 21% (3º)
 
Glosario de la Memoria 2016/17:
* Ritmo: posesiones cada 48 minutos / Ef. Ofensiva: puntos producidos cada 100 posesiones / Ef. Defensiva: puntos recibidos cada 100 posesiones.
* Porcentaje efectivo: une valores en tiros de dos y triples / Tiros libres: porcentaje de tiros libres (lanzado o recibido) sobre el total de lanzamientos / Pérdidas: pérdidas de balón (propias o provocadas) cada 100 posesiones / Rebote ofensivo: Capturas de ataque (conseguidas o permitidas) sobre el total.

thunder

Tras protagonizar una campaña para la historia, Russell Westbrook recibió ayuda en verano. Sam Presti volvió a demostrar por qué es uno de los gestores más brillantes de la Liga, orquestando dos traspasos salvajes: Paul George y Carmelo Anthony, con situaciones problemáticas en Indiana y Nueva York respectivamente, acabaron en Oklahoma. Así los Thunder del monólogo de un prodigio han pasado a ser un monstruo de tres cabezas listo para agitar el Oeste.

A estas alturas posiblemente ya sepas que Westbrook promedió un triple-doble la temporada pasada, una situación con solo un precedente (Oscar Robertson, la campaña 1961-62). También que batió el récord de triples-dobles en un curso, con 42. Pero saber que sucedió no es lo mismo que entenderlo. Quizás para comprender la dimensión de la barbarie sea necesario mucho más tiempo.

En un baloncesto con un ritmo monstruosamente inferior al de hace medio siglo (125 posesiones los Royals de Robertson, 99 los Thunder), con un orden táctico y despliegue atlético medio muy por encima, y un minutaje reseñablemente más bajo (44 minutos de media Robertson, menos de 35 Westbrook), estos días la hazaña representa casi una anomalía. Un absurdo.

No quedó ahí. La cumbre de Westbrook reanimó a una franquicia destrozada anímicamente tras la marcha de Durant, convirtiendo después a ese equipo en algo mucho más competitivo de lo que podía aparentar. De lo que sin él en realidad era. Sin Westbrook los Thunder atacaron (bastante) peor que los Sixers. Literalmente. Y fueron destrozados tanto en fase regular como en playoffs. Allí los Rockets le sacaron 58 puntos en los 46 minutos que él descansó. La diferencia fue, todo el año, la noche y el día, solo que con la asombrosa evidencia de ver cómo toda la luz la servía un solo hombre.

Más allá de filias o fobias alrededor de su estilo, Westbrook dejó una respuesta legendaria a una situación colectiva de enorme dificultad. Una serie de hitos que ayudaron a creer de nuevo a una comunidad e hicieron mejor a su equipo. A su forma, que de nuevo puede ser o no compartida, plantó la semilla del renacimiento del proyecto.

Hacer efectivo el Big Three

La llegada de Paul George y Carmelo Anthony, aunque sea solo un año a expensas de qué sucede con sus respectivas agencias libres, cambia radicalmente el escenario. La apuesta es inmediata y entraña riesgo, sí, pero con Westbrook pudiendo haber también optado por salir, Presti buscó el mejor modo de convencerle para seguir: darle todas las herramientas posibles para competir. Y a la vista está que lo ha logrado.

Los Thunder tuvieron al base con un inhumano 40.8% de uso ofensivo (volumen de jugadas que un jugador finaliza con tiro de campo, tiros libres o pérdida), dato más alto de la historia. Pero ahora tendrá oxígeno al lado.

En ataque se deberá hallar un escenario de coexistencia entre tres hombres que pueden amasar mucho balón. Pero es posible interpretando los perfiles de los dos recién llegados. George puede ejercer como generador desde el bote o ejecutor sin balón. Llevando el pick&roll dejó datos fantásticos (más de un punto por posesión), a pesar de tener una muestra baja. En lo segundo, su 42% en triples tras recepción es ya revelador.

Foto: Layne Murdoch/NBAE via Getty Images)

Anthony es menos explosivo y efectivo en pick&roll (sólo 0.8 puntos por posesión) pero igualmente letal con su tiro, más aún si le conceden la ventaja. Es posible que Melo deba aceptar un rol más cercano al límite de cuatro abierto que al de gestor de balón. En cierta medida similar al que ha solido desarrollar cuando ha competido con la selección estadounidense.

El objetivo al final es revitalizar la ofensiva. Los Thunder tuvieron dos problemas serios ahí el pasado año: fue el equipo que menos pasó el balón (260 veces por partido), lo que llevó al extremo su sistema vertical; y tuvo una amenaza exterior muy reducida, lo que aumentó aún más la sensación de embudo.

Wetsbrook fue un poseso atacando el aro pero juntarle con Roberson creaba problemas en ataque y hacerlo con Morrow no compensaba atrás. Los Thunder tiraron un bajo volumen de triples (entre los diez peores NBA) y después fueron el equipo que menor porcentaje registró en ellos (32.7%). Con George y Anthony el diseño de ataque mejorará, abriendo por un lado una vía de quintetos pequeños y por el otro un camino a generar formatos productivos con el banquillo, arrojando a uno de ellos con la segunda unidad para flexibilizar las rotaciones.

En defensa George es un salto diferencial para la estructura. Tremendamente versátil, fantástico sobre el balón y muy útil cambiando asignaciones. En su mejor versión, el plan de Donovan se sostuvo bajo la unión de Durant y Steven Adams como hombres grandes en un sistema muy agresivo. Siendo distinto a Durant, sobre todo por ser menos útil en la protección de aro, George comparte ese perfil largo y atlético que puede replicar ciertos aspectos de aquella idea.

Diferente es el caso de Anthony, que puede que tenga que ser escondido en ciertas partes de un sistema que, no obstante, puede juntar multitud de especialistas en todas las áreas. Los Thunder lo volverán a tener todo para tener una de las mejores defensas de la Liga.

Muchas posibilidades por ajustar

La franquicia se hizo en verano con Raymond Felton, para el rol de base suplente, y Patrick Patterson, muy interesante por dar versatilidad defensiva y además abrir el campo en ataque. Su perfil resulta valioso por ser compatible con las estrellas y Adams pero al mismo tiempo servir un potencial formato hiperdinámico con él como cinco. Con las limitaciones de la rotación por dentro tras la marcha de Kanter, los Thunder pueden pasar a jugar más small-ball que nunca.

El equipo acumula cuatro años consecutivos liderando la NBA en diferencial de rebotes, pero el hecho de aumentar el dinamismo no debería comprometer en exceso una de sus mayores fortalezas, sobre todo considerando que su perímetro guarda jugadores  potentes en ese área (Westbrook, Roberson, George y Anthony ayudan muchísimo en el rebote defensivo). No obstante, una lesión de Adams podría resultar catastrófica para el plan. Ya que, a falta de más movimientos en los despachos, no hay recambio fiable.

Sin embargo más allá de la problemática interior, las variables tácticas en cuanto a diferentes formatos a usar es muy notoria. Una vez ha ganado más tiro (y seguirá teniendo a Álex Abrines en la segunda unidad para reforzarlo), Donovan puede usar mucho más inteligentemente a Andre Roberson (renovado en verano), cuyas lagunas con el lanzamiento exterior solían oscurecer su fantástico nivel en el otro lado de la pista.

El técnico puede servir formatos de mucho poder atrás con aleros muy grandes y versátiles (Roberson-George-Patterson), jugar con la influencia de Carmelo Anthony como cuatro abierto o pasar a plantear quintetos mucho más pequeños que despejen la zona para las embestidas de Westbrook. Deberá existir paciencia para un equipo con muchos detalles y ajustes que trabajar, pero si el resultado es óptimo el techo será altísimo.

Datos de lupa:

  • Colectivo:

Los Thunder promediaron 46.6 rebotes por partido, tope de la Liga. Y 6 más de media que sus rivales, también liderando la NBA.

  • Individual:

Russell Westbrook promedió más de 35 puntos por partido ante nueve rivales diferente el pasado año, casi un tercio de la Liga. Ante Orlando promedió 49.

Situación salarial:

  • Salarios franquicia: 131 millones
  • Límite salarial: 99.1 millones
  • Impuesto de lujo: 119.2 millones
  • Mínimo salarial: 89.2 millones

Fuente: Basketball Insiders

  • Opción de jugador
  • Opción de equipo
  • Qualifying Offer
  • No completamente garantizado

Los Thunder poseen un payroll cargadísimo. Entre otras cosas porque Sam Presti lo ha puesto todo sobre la mesa. En otra jugada maestra de su Gerencia, Oklahoma se hizo primero con Paul George en verano, vía traspaso. Lo hizo a pesar de que el jugador puede salir al mercado sin restricciones (y seguramente así será) en 2018 pero se trataba de apostar fuerte para, entre otras cosas, retener al vigente MVP. Con ese mismo sentido se realizó después el movimiento para unir a la causa a Carmelo Anthony (que también puede salir al mercado el próximo verano). Pero la valentía salió bien: Russell Westbrook firmó una extensión de 205 millones (por 5 años), el contrato más alto de la historia NBA.

Además de renovar a Nick Collison (2 millones por 1 año), los Thunder retuvieron a Andre Roberson ofreciéndole 30 millones por 3 temporadas y firmaron en la agencia libre a Patrick Patterson (16 por 3) y Raymond Felton (2 por 1). El gran punto de inflexión del proyecto estará en verano, con Westbrook ya atado el deseo será retener este núcleo de talento… pero está por ver que los costes sean sostenibles. Ahora mismo hay cuatro contratos por encima de 19 millones de dólares siendo el menor de ellos, el de George, susceptible de ‘máximo’ en verano. Una apuesta muy fuerte… pero muy compleja de sostener a un años vista.

Jugador a seguir:

Russell Westbrook consiguió lo que parecía imposible el curso pasado: promediar un triple-doble, llevando a su equipo a 47 victorias en el Oeste. Pero conociendo su obsesiva ética de trabajo resulta probable que quiera llevar su nivel aún más allá. Mejor acompañado y con el contrato más alto de la historia ya asegurado, el base más atlético de la historia será de nuevo candidato al MVP.

Foto: Getty

 

Deliza hacia abajoSigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
Desliza hacia abajoSigue deslizando hacia abajo para ver más contenidos
Cargando el siguiente contenidoEspera un momento por favor :)