La fama, muchas veces se ha dicho, no es buena compañera de viaje. Más de una vez, a buen seguro, se ha arrepentido Harold Miner de tenerla bajo el sobrenombre de Baby Jordan. Hablamos de un base que arrastró ese mote desde High-School y que acabó por jugar únicamente cuatro años en la NBA.
Harold Miner, un proyecto frustrado de estrella NBA
Nos referimos a un base, nacido en la localidad californiana de Inglewood, que acaba de cumplir 49 años. Y con su 1,96 de altura, Harold Miner levantó una gran expectación desde bien joven por su facilidad para hacer mates, de ahí su comparación con MJ. De hecho, en su año rookie en la liga el playmaker ya fue capaz de hacer barbaridades en un concurso de mates, el de 1993, disputado durante el All-Star Weekend de Utah.
Ganaría en 1995 otro concurso de dunkers el jugador formado en la Universidad de South Carolina. Con los Trojans promedió 23,5 puntos y 5,4 rebotes por partido Harold Miner, lo que le valió para ser elegido en el número 12 del draft de 1992 por los Miami Heat con unas expectativas muy altas puestas en su figura.
Una expectación que el base nunca pudo cumplir. El apodo de Baby Jordan puede casi con cualquiera, y Miner lo demostró sobreviviendo únicamente cuatro años en la NBA. Tras jugar dos primeros cursos decentes en Miami (10,3 y 10,5 puntos de promedio, respectivamente), bajó en picado su aportación en su tercer año en Florida para acabar al año siguiente en unos Cleveland Cavaliers en los apenas disputaba 7 minutos por encuentro.
Al menos jugaba, algo que no hizo en su última franquicia en la liga, los Toronto Raptors. Harto de su poca importancia y de las críticas por su rendimiento y su falta de actitud defensiva, Harold Miner se retiró del deporte profesional con sólo 25 años. Nunca más se supo de uno de los herederos del gran Michael Jordan… con el que las comparaciones, como se dice (en este caso con toda la razón), son odiosas.
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Foto: Getty Images
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