Dor prepotencia, por desconocimiento o por ambas, la elección de Jonas Valanciunas en el Draft de 2011 tuvo una primera sensación más de risa que de seriedad. El mero hecho de que el jugador lituano tuviera grandísimos problemas para expresarse en inglés con la prensa norteamericana fue lo le marcó. Las bromas iban siempre acompañando a su nombre o a la frase «el lituano ese alto» en los corrillos de los media. Ahora, con su juego y su más que supuesta superioridad en la pintura, será Valanciunas el que reirá mejor. Callar bocas y dar por terminadas las risas es un primer objetivo. Tener una carrera larga y fructífera en la NBA, a tener de sus condiciones para el deporte de la canasta, una obligación.
Preparado para la Liga
Las primeras preguntas a las que tuvo que responder el center lituano tras ser seleccionado por los Toronto Raptors se referían a si estaba dispuesto a desembarcar inmediatamente en la NBA o si por el contrario pensaba quedarse en Europa un tiempo antes de hacer las maletas…
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